El Celta se complica la vida en Balaídos

Vigo

El Bolonia fue capaz de imponer su físico en la segunda parte y se lleva tres puntos de Balaídos. Un triunfo que le permite superar al Celta en la clasificación de la Europa League y le complica al equipo celeste el horizonte. Ahora le obliga a ganar al menos un partido y ya veremos si otro más. Al equipo de Giráldez le volvió a costar crear ocasiones de gol; le pasó como contra el Espanyol, muy poco bagaje ofensivo con apenas un disparo muy desviado de Rueda. Así es complicado meterle el miedo en el cuerpo a un equipo como el Bolonia, que va quinto en la Serie A.

El primer tiempo comenzó con un Bolonia mandón y un Celta esperando para intentar matar a la contra y esperar pacientemente ante un equipo tan físico como el italiano. Rondó la portería de Radu el equipo de Vicenzo Italiano con alguna opción de disparo que acabó con apenas sustos para el Celta. Todo cambió en una genialidad de Williot que hace un autopase de tacón, con media vuelta incluida, para sentar a Charalampos y se planta solo delante de Ravaglia. Cuando parecía que se la iba a jugar él, Willy demuestra su sangre fría para meter un pase perfecto a Bryan para marcar su primer gol con la camiseta del Celta. Lo necesitaba el andaluz. Y se fue a abrazar a Claudio después del importantísimo 1-0.

El otro día Bryan asistió a Williot. Hoy el sueco se la devolvió. Buena noticia para Claudio que ya estén aquí ambos. En medio de un criterio arbitral de Petrescu bastante extraño, el Bolonia tuvo el empate en el fallo defensivo de cada partido del Celta. A la espalda de Starfelt, que se confía con el bote y deja solo a Rowe, que perdona el 1-1. Radu volvió a ser Radu con un paradón a Santiago Castro que desperdició un mano a mano que el rumano intuyó y le tapó portería extraordinariamente bien.

En la segunda parte todo cambió. El Celta dudó, no supo leer la hoja de ruta y el Bolonia encontró más espacios para buscar la portería de Radu. Después de un gol anulado a Pobega por fuera de juego, llegó el penalti de VAR que marcó Bernardeschi. El empate era justo, pero no se conformó el Bolonia, que fue a por el segundo y lo encontró con un buen gol individual de Bernardeschi, que se fue con facilidad de Ristic. Se ponía 1-2 y, a partir de ahí. Comenzó a exhibir su capacidad para hacer el "otro fútbol" que también dominan. Apenas se jugó y apenas el Celta fue capaz de hacer daño. Desde la salida de Borja Iglesias, el equipo de Giráldez enviudó en el puesto de nueve y creó muy pocas situaciones de gol. Nos costó como el día del Espanyol llegar a puerta rival.

Ahora toca administrar esfuerzos europeos y pensar en Athletic y Albacete. Ya tocará pensar en enero en Lille y Estrella Roja. Una noche lluviosa y con poco fútbol del Celta.

Lo de Petrescu, el árbitro rumano, no pasará a la historia de la UEFA por su arbitraje. Peor imposible, aunque no se puede escudar el Celta en el arbitraje. Hoy no fue el del Bernabéu. Hoy fue el del Espanyol.