Novela negra y misterio: tres lecturas imprescindibles que enganchan y alivian el estrés
Nos lo cuenta Esther Gómez de Moito Conto
A Coruña
La novela negra y de misterio sigue siendo uno de los géneros literarios más leídos y valorados por el público. Lejos de pasar de moda, cada año gana nuevos lectores y lectoras que encuentran en estas historias una mezcla perfecta de intriga, ritmo y evasión. De ello habló Esther Gómez, de la librería Moito Conto, en una conversación centrada en por qué este género resulta tan adictivo… y tan necesario.
¿Por qué la novela negra nunca falla?
Según Esther Gómez, la novela negra es un género “imbatible”. Hay lectores fieles que no leen otra cosa y otros que, aunque no sea su opción habitual, siempre acaban volviendo a ella. Incluso existe la creencia —compartida por muchos lectores— de que es el único género que realmente reduce el estrés.
Puede parecer contradictorio: historias cargadas de tensión, crímenes e investigaciones… pero precisamente ahí está la clave. Los autores de novela negra dominan como pocos el manejo de la intriga, los giros narrativos y la captación de la atención, logrando que el lector se evada por completo de los problemas cotidianos.
No es casualidad que muchas personas entren en librerías con una petición clara: “recomiéndame otra novela negra” o “quiero regalar novela negra, porque es lo que más le gusta”.
Tres novelas negras recomendadas que no puedes perderte
- Punto cero, de Seichō Matsumoto (Libros del Asteroide)
Publicada originalmente en los años 50 y reeditada recientemente por Libros del Asteroide, Punto cero es una obra clave del maestro japonés Seichō Matsumoto, uno de los grandes referentes del misterio psicológico.
La novela se sitúa en el Japón de finales de los años 50 y cuenta la historia de Teiko, una joven que se casa mediante un casamentero con un ejecutivo al que apenas conoce. Tras una breve luna de miel, su marido desaparece sin dejar rastro. A partir de ahí, Teiko se convierte en investigadora de su propio caso, algo poco habitual en la obra del autor.
No es una novela negra sangrienta ni de acción frenética. Su fuerza está en la sutileza, la atmósfera y la tensión constante, donde “parece que no pasa nada, pero pasan muchas cosas”. Ideal para quienes buscan un misterio elegante, psicológico y profundamente inquietante.
- El misterio de Hannah Larson, de Alexandre Escrivá (Alfaguara)
Esta novela representa la novela de suspense contemporánea, con un ritmo ágil y una estructura muy actual. Su autor, Alexandre Escrivá, nacido en 1996, se consolida como una de las voces jóvenes más prometedoras del género.
La historia arranca con un impacto brutal: Patrick Howard, famoso periodista especializado en true crime, se suicida en directo durante un programa de máxima audiencia en Nueva York. Todo apunta a un suicidio… excepto para Alison Hess, una joven detective que sospecha que hay algo más detrás.
Un manuscrito desaparecido, un crimen del pasado y múltiples tramas personales se entrelazan en una novela muy bien construida, recomendada por César Pérez Gellida, uno de los grandes nombres de la novela negra en español. Un libro absorbente, lleno de giros y perfectamente equilibrado.
- El caso Salgueiro, de Óscar Reboiras (Alfaguara / Galaxia)
Publicada originalmente en gallego como Agonía das folerpas (Editorial Galaxia, Premio de Novela Galicia Rural) y ahora en castellano como El caso Salgueiro, esta obra de Óscar Reboiras, escritor residente en A Coruña, se ha convertido en un auténtico fenómeno.
La novela arranca con un hallazgo estremecedor: varios cadáveres enterrados bajo la nieve formando una estrella en una aldea aislada y lluviosa. A partir de ahí, la joven periodista Fina Novoa intenta cubrir el caso mientras se enfrenta a intereses ocultos, especulación inmobiliaria y silencios peligrosos.
Con dos líneas temporales y una fuerte carga social, Reboiras demuestra un gran dominio de la trama y de los personajes. Es una novela negra potente, oscura y muy ligada al territorio, que ya está siendo leída y traducida fuera de Galicia.
Tres estilos, un mismo poder de atracción
Estas tres novelas demuestran que la novela negra puede adoptar muchas formas: desde la sutileza japonesa de Matsumoto, pasando por el thriller urbano contemporáneo, hasta el noir rural gallego con fuerte trasfondo social.
Todas tienen algo en común: enganchan, crean adicción lectora y ofrecen una evasión real, convirtiéndose en lecturas ideales tanto para amantes del género como para quienes quieren adentrarse en él por primera vez.
Una cosa está clara: la novela negra sigue muy viva… y tiene cuerda para rato.
