¿Qué probabilidades hay de ganar el Gordo? Un catedrático de la USC lo explica
Manuel Febrero, experto en estadística, desmonta mitos sobre la Lotería de Navidad: “Es más ilusión que matemática”

MADRID, 22/12/2025.- Vista de una de las bolas con el premio de 4 millones de euros durante los preparativos para el inicio del Sorteo Extraordinario de Navidad, que repartirá 2.772 millones de euros en premios, este lunes, en el Teatro Real de Madrid. EFE/Chema Moya / Chema Moya (EFE)

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La ilusión por ganar el Gordo de la Lotería de Navidad vuelve a llenar administraciones y conversaciones en estas fechas, pero ¿qué dicen los números? El profesor Manuel Febrero, catedrático de Estadística e Investigación Operativa en la Universidad de Santiago de Compostela, ha puesto cifras a esa esperanza: “La probabilidad de que nos toque el Gordo es de una entre 100.000”.
Febrero recuerda que el sorteo reparte muchos premios, pero recuperar lo invertido no es fácil: “Tener algo más, como la pedrea, está en torno al 5%, y el reintegro ronda el 15%. No son porcentajes ilusionantes”, señala. Además, subraya que la lotería está diseñada para redistribuir el dinero, quedándose el Estado con aproximadamente un 30% de lo recaudado, más impuestos sobre los grandes premios. “Como contribuyente, me parece bien, pero como inversión es un mal negocio”, añade.
¿Sirve gastar más para aumentar las opciones? “Sí, pero habría que invertir mucho. Si compras 100 números distintos, la probabilidad de ganar el Gordo apenas sube al 0,1%. Es un buen negocio para Hacienda, no para el jugador”, explica el experto.
El profesor también desmonta creencias populares: elegir números por fechas especiales, acudir siempre a la misma administración o confiar en que “este año toca” son rituales sin base estadística. “El azar puro es caos perfecto: no tiene memoria, ni corazón, ni sentimientos. No hay forma de encontrar un patrón para ganar”, afirma.
Febrero diferencia la lotería de otros juegos como el póker o las apuestas deportivas, donde la habilidad y la información pueden influir. “En el póker no todo es azar: interviene la estrategia y la lectura del rival. Pero en la lotería, no hay nada que hacer”, concluye.
En definitiva, la Lotería de Navidad sigue siendo un juego de ilusión más que de lógica. Como dice el catedrático, “la esperanza es reducida, pero la ilusión es lo último que se pierde”.




