La CIG tacha de "burla" el aumento presupuestario de la Xunta para el SAF
Denuncian que la Xunta ha derivado la gestión a los concellos sin transferir los fondos necesarios
Imagen de archivo de las protestas de la CIG sobre las carencias del SAF
El sindicato CIG ha reaccionado con dureza ante la propuesta de la Xunta de Galicia para incrementar la financiación del Servizo de Axuda no Fogar.
La central sindical ha calificado de "burla" las cifras presentadas y exige una dotación económica que garantice tanto la calidad asistencial como unas condiciones laborales "dignas" para un sector altamente precarizado.
Un incremento "insuficiente"
En el marco de las negociaciones entre la Consellería de Política Social y la FEGAMP, Carlos Alján, secretario nacional de CIG-Servizos, denunció que la aportación actual de la Xunta se sitúa en apenas 12 euros por hora.
La hoja de ruta del Gobierno autonómico propone elevar esa cifra a 14 euros en 2026 y alcanzar los 16 euros en 2028, mediante un aumento progresivo de un euro anual. Para el sindicato, este calendario es totalmente insuficiente para cubrir las necesidades reales del sector.
"No alcanza el nivel presupuestario para que el servicio se preste en las condiciones que precisa el sector", advirtió Alján, subrayando que la propuesta actual no soluciona el déficit estructural del servicio.
Externalización y "esclavitud" laboral
Desde la central nacionalista recuerdan que, aunque el SAF es un servicio público de competencia autonómica, la Xunta ha derivado la gestión a los concellos sin transferir los fondos necesarios. Esta falta de recursos ha provocado que la mayoría de los municipios opten por la externalización a empresas privadas.
Según la CIG, este modelo de gestión indirecta ha tenido dos consecuencias críticas. Por un lado, una caída en la calidad de la asistencia a los usuarios. Por otro, el sindicato llega a hablar de una "condena a la esclavitud" para las trabajadoras del sector.
Seguridad tras el crimen de O Porriño
Más allá de lo económico, la CIG ha puesto el foco en la seguridad de las trabajadoras. El sindicato urge a la Xunta y a la FEGAMP a convocar de inmediato la mesa de trabajo para aprobar un protocolo de prevención ante situaciones de violencia.
Esta demanda cobra especial relevancia tras el asesinato de una trabajadora del SAF en O Porriño este mismo año. La central exige medidas eficaces que garanticen la integridad física de las empleadas en el ejercicio de sus funciones, un compromiso que, denuncian, sigue pendiente de materializarse.