Año nuevo, situación contractual nueva
Hasta siete jugadores del Celta podrán negociar su futuro a partir del 1 de enero

VIGO, 03/09/2024.- El director deportivo del Celta de Vigo, Marco Garcés, ofrece una rueda de prensa para comentar el mercado de fichajes que se ha cerrado recientemente, este martes en Vigo. EFE/ Salvador Sas / Salvador Sas (EFE)

Vigo
Marco Garcés tiene unas Navidades intensas para negociar los traspasos de Luca de la Torre y de Tadeo Allende, para negociar alguna rescisión que alivie una plantilla cargada de jugadores con los que no se cuenta, para intentar el retorno de Fer López cedido desde el Wolverhampton o alguna posible venta que se pudiese realizar o encauzar pensando en cumplir a 30 de junio el fair play financiero. A todas estas preocupaciones y ocupaciones para el director de Fútbol del Celta, hay que añadirle una fecha clave: 1 de enero de 2026.
A partir del jueves de la próxima semana, hay 7 jugadores celestes que tendrán el futuro en sus manos y podrán negociar con otros clubes, además de con el Celta, para afrontar la temporada 26-27. Como son 7 los casos y 7, por tanto, los jugadores, hay situaciones para todos los gustos. De los que más preocupan a los que supondrán incluso un alivio para el límite salarial y la tranquilidad del propio Garcés. En este grupo se encuentran tres nombres que, a lo largo de los últimos meses y los últimos mercados, han sido un auténtico culebrón. Es el caso de Franco Cervi, al que el club lleva buscándole una salida desde hace tiempo, pero la negativa del argentino a abandonar Vigo le lleva a convertirse en una rotación residual. Cervi es un convocado testimonial en muchos de los partidos en los que Claudio necesita dar descansos o tiene muchas bajas. La idea del Celta es intentar, por enésima vez, alcanzar un acuerdo con el jugador para su salida en el mercado de invierno. En caso de que siga con el no rotundo como respuesta, esperará a que expire su contrato el 30 de junio de 2026.
Joseph Aidoo también es otro de los culebrones que el club intenta atajar. Lo quiere hacer ya y en ello está. Las negociaciones están abiertas para incluso rescindir el contrato, indemnizar al jugador y poder liberar su ficha superior al millón de euros. Aidoo no cuenta para Claudio, aunque tuvo un par de apariciones esporádicas en las rotaciones celestes. Garcés negocia para finiquitar uno de los casos que bloquean las operaciones de llegadas.
El tercer jugador que está en una situación parecida, aunque no similar, es Mihailo Ristic. El serbio ha sido, entre lesiones, bajones de rendimiento y falta de continuidad, una apuesta fallida del Celta. No ha estado a la altura de lo que se esperaba de él y es complicado verle más de dos-tres partidos seguidos jugando. Y eso que no tiene competencia en el perfil zurdo en el que juegan diestros a pierna cambiada. Mingueza, Carreira o Hugo Álvarez. Ristic pasará por el Celta con más pena que gloria y su papel de actor secundario ha sido preocupante. Es otro de los que no hay duda de que terminará el 30 de junio de 2026 y se irá de Vigo.
Los dos casos que llevan desde el verano encima de la mesa y que cada vez están más cerca de irse que de quedarse son los de Beltrán y Mingueza. Dos de los jugadores que están en el escalón salarial más alto, pero con diferente rendimiento y rol en el esquema del EuroCelta. En el caso del mediocentro madrileño, su papel ha ido menguando a lo largo de estos meses, en donde le han adelantado en la rotación primero Hugo Sotelo, que empezó la temporada a muy buen nivel, y luego Miguel Román. En Liga apenas ha sido titular en 7 partidos y sí ha tenido más continuidad en la Europa League, en donde lo ha sido en cuatro de los seis choques. Pero nada que ver con el jugador absolutamente intocable en el once inicial que lo jugaba absolutamente todo. Ya en verano se habló muy poco de conversaciones entre Celta y representantes y parece que la situación está abocada al adiós de Beltrán, salvo un cambio drástico de última hora que no parece que se vaya a producir. La distancia es considerable y su participación ha menguado también en los esquemas de Claudio Giráldez.
El otro nombre es el de Mingueza. Antes y durante el verano parecía que todo iba por buen camino y que era cuestión de poco tiempo poder anunciar su continuidad. Giráldez lo considera una pieza fundamental; es el jugador con más valoración de mercado, con 18 millones de euros, y su aportación en el ataque celeste es fundamental. Pero después del verano la duda se instaló en las negociaciones que se fueron frenando y la situación cambió notablemente. A medida que pasaban las semanas y se acercaba, cada vez más, la fecha del 1 de enero, las posibilidades de que Mingueza continúe en Vigo van decreciendo. Es cierto que el catalán mantiene siempre declaraciones “ilusionantes” de que su idea es seguir en Vigo. Pero esas declaraciones no van a la par del avance en las negociaciones entre ambas partes. Ofertas no le faltan ni le van a faltar y, a partir de la próxima semana, ya puede decidir su futuro y firmar un precontrato con cualquier club del mundo. Su salario y las ofertas que podrá tener encima de la mesa al llegar con la carta de libertad. No se descarta que el club intente hacer otro esfuerzo para convencerle. Y convencerle pasa por subir su ficha y multiplicar el número de años de contrato.
Este domingo cumplía 35 años Marcos Alonso. Su nombre es otro de los que también está encima de la mesa de Marco Garcés y con la misma fecha en la carpeta: 1 de enero de 2026. El defensa madrileño ha tenido un segundo año más complejo y con un rendimiento más irregular y menos solvente que el de su primera campaña. El Marcos Alonso del año pasado estaría renovado con los ojos cerrados ya en verano. Precisamente ya se habló en verano de renovarle y no solamente por un año. Pero han pasado las semanas y los meses y todavía no se ha llevado a cabo la operación. El rendimiento de Marcos Alonso dista bastante del dado en su primera temporada, aunque, con el paso de las jornadas, es cierto que ha ido mejorando y nos ha vuelto a recordar al líder de la defensa. En las últimas cinco jornadas, el Celta ha dejado la portería a cero en cuatro de ellas Lo normal es que Celta y Marcos Alonso se pongan de acuerdo porque su encaje en el vestuario también es algo clave e importante para el ambiente. Tiene madera de líder en el campo y su experiencia es fundamental para hacer crecer a los jóvenes defensores que quieren seguir ampliando su experiencia y mejorando sus prestaciones.
La última de las carpetas lleva el nombre de Iago Aspas. Solamente Iago sabe cuál es su futuro y qué tiene pensado. Lo normal es que siga y así lo dejó claro tanto su madre como su hermano y representante. Pero hay que esperar porque las sensaciones que tenga el Príncipe de las Bateas serán fundamentales. También el proyecto que pueda ofrecer el club para la próxima campaña y, también, el ver las aspiraciones que pueda tener el club. Sin olvidarnos de su físico que, a los 38 años, está claro que ya no está para jugar domingo y miércoles. Garcés, Marián Mouriño y Claudio ya han dejado claro que será Aspas el que decida. Todo el celtismo espera el anuncio de que, como mínimo, siga un año más. Pero tiene pinta de que habrá que esperar unos meses para el anuncio.

Jacobo Buceta
Periodista de Radio Vigo-Cadena Ser desde 1998. Director de Hoy por Hoy Vigo desde 2008 y narrador de...




