Cartagena

En las Historias desconocidas de la Historia conocida de esta semana y, aprovechando que, hace unos días el muelle de la Terminal de Cruceros pasó a llamarse Juan Sebastián Elcano, vamos a recordar aquella efeméride que inició Magallanes y culminó Elcano, en la que también tuvo algo que ver algún cartagenero.

El 10 de agosto de 1519, larga amarras la flota capitaneada por el portugués Fernando de Magallanes. Parte del muelle sevillano de las Mulas, en la orilla oeste del Guadalquivir, donde crecerá el Barrio de los Remedios.

Viajan las siguientes naos: Trinidad, comandada por Magallanes; San Antonio, capitaneada por Juan de Cartagena, que también era el auditor, nombrado por Carlos I; Concepción, bajo el mando de Gaspar de Quesada –en la que va Juan Sebastián Elcano como Maestre–; Victoria, al frente de la cual está Luis de Mendoza, y la nao Santiago, dirigida por Juan Rodríguez Serrano. Los tripulantes de esas naves son un total de 247 marinos.

Ninguno de los capitanes mencionados volverá con vida a España. Juan de Cartagena, tampoco. Todos irán cayendo a lo largo del viaje.

Tras la muerte de Magallanes, en Mactán (Filipinas), Juan Sebastián Elcano se pondrá al mando de la nao Victoria, la única que quedará de la flota inicial. Completará la primera vuelta al mundo, arribando nuevamente a Sevilla, después de 3 años y 28 días de vicisitudes y calamidades, junto con los otros 17 tripulantes supervivientes.

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Esta gesta aportará a la historia, no sólo la conexión con los nuevos territorios incorporados a la Corona española, sino el inicio del comercio a escala mundial, modernamente llamado globalización. Muchos la comparan con la exploración a la Luna, en 1969.

Y, como en España somos así, el 10 de agosto de 2019, exactamente quinientos años después, tiene lugar la salida, desde el mismo lugar, en Sevilla, del velero PROS, que emulará la expedición que hace exactamente 500 años inició Magallanes y culminó Juan Sebastián Elcano, dando la primera vuelta al mundo. Se hará siguiendo idéntico trayecto y en el mismo tiempo que se hizo por parte de la expedición de 1519. Al igual que aquella, hay que incorporar ésta a las efemérides de Cartagena porque si en la primera expedición había al menos un hijo de esta ciudad, Juan de Cartagena, en ésta también hay algún paisano que forma parte de los equipos del velero PROS. En principio, Diego Fernández Casado, conocido de esta casa.

Y ahí siguen, repitiendo aquella expedición.

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Efemérides de la semana del 13 al 19 de junio

El 13 de junio de 1590, a la vista de que ni con las salidas de los vecinos se puede extinguir la plaga de langostas, y además han aparecido abundantes sabandijas que son muy nocivas para los sembrados, el Ayuntamiento de Cartagena, a la vista de los buenos resultados que han tenido lugar en otros sitios con los exorcismos y conjuros del padre Baltasar, acuerda que el comendador Nicolás Díaz vaya a Alcaudete, donde reside dicho cura y procure traerlo para que conjure la langosta y las sabandijas que tantos daños hacen en las viñas y sembrados. Bueno, aquellos antepasados nuestros aún creían en milagros y todavía no se conocía la fumigación.

El 19 de junio de 1593, ordena el obispo que el dinero que resulte sobrante en Cartagena sea llevado a Murcia. El Ayuntamiento escribe al prelado pidiéndole que no se repita este hecho, sin antes haber satisfecho las mínimas necesidades para que los oficios religiosos se celebren con la decencia y la importancia que corresponde a esta insigne ciudad, además poseedora del nombre del Obispado. Bueno, que les voy a contar a ustedes que no sepan. Sin comentarios.

El 14 de junio de 1884, aparece una noticia en un periódico local, informando que, el inspector de Mercados, señor Yíguez, ha denunciado en la Alcaldía de Cartagena a un industrial del mercado de la plaza de la Merced, expendedor de carnes, quien «generosamente» en cada 125 gramos daba 40 gramos de menos. La cosa realmente nada tiene en consideración, ya que esto es tan sabido por vendedores y compradores, que el vendedor lo hace descansando en la impunidad del delito y el comprador resignado en vista de que es un mal que no tiene remedio. Toda vez que, a pesar del celo y la vigilancia que existe, las denuncias y multas no producen eficaz resultado. De aquí nacen los abusos que incesantemente se están cometiendo y que viene denunciando la prensa local sin resultado alguno. Un tendero dice que «esto de robar en el peso durará mientras el mundo exista, por no tener remedio». Vaya tela, y lo decían así como una resignación.

El 19 de junio de 1899, dan comienzo las obras para la construcción en la calle Saura, del Patronato del Sagrado Corazón de Jesús. Magnífica institución que aun, hoy en día sigue funcionando maravillosamente.

El 16 de junio de 1953, en la calle Real, a espaldas del Teatro Circo, se instala un cine de verano el cual hizo las delicias de las noches de verano con sus proyecciones. Pues tal que aquí mismamente, donde nos encontramos, se encontraba la pantalla.

El 13 de junio de 1971, se produce un importante hallazgo arqueológico en la calle del Duque. Se trata de La Casa de la Fortuna, una domus romana del siglo I antes de Cristo. Recibe su curioso nombre por una inscripción latina, situada en su entrada trasera en la cual se lee: «Fortuna propitia». Es adaptada para uso museístico.

Y, el 13 de junio de 2017, por la Secretaría de Estado de Turismo, del Ministerio de Energía y Turismo del Gobierno de España, se concede el título de Fiesta de Interés Turístico Internacional a las Fiestas de Carthagineses y Romanos de Cartagena. Y ahí siguen, grandes y magníficas.

Buenas tardes amigos, les espero la semana que viene para seguir con nuestras historias. Mientras tanto, cuídense y hagan caso a las autoridades sanitarias, porque el bicho aún no se ha ido, el bicho sigue ahí.