¿Por qué la árida Región de Murcia está resistiendo mejor la sequía que otras zonas del país?
La bajada de reservas hídricas ha llevado a otras cuencas a declarar el estado de alerta por sequía mientras que la cuenca del Segura sigue en situación de prealerta desde marzo y así va a acabar el año hidrológico el próximo 30 de septiembre
Murcia
La respuesta es sencilla: estamos mejor preparados. Mientras que en el resto de España la sequía de este verano es una situación coyuntural, en la Región de Murcia la sequía es una situación estructural y prolongada en el tiempo. La meteorología también ha ayudado, las intensas lluvias registradas esta primavera recargaron los pantanos de la cuenca y evitaron que se declarase la alerta por sequía en el mes de mayo, como tenía previsto hacer la Confederación Hidrográfica del Segura.
Aunque los embalses también pierden recursos y se encuentran de media al 36% de su capacidad, la cuenca del Segura cuenta con recursos que otras cuencas no tienen y que han evitado, de momento, la aplicación de restricciones al regadío: la desalación y la reutilización. Lo ha explicado en los micrófonos de Hoy por Hoy Región de Murcia el presidente de la CHS, Mario Urrea, que ha asegurado que "nos encontramos en una situación mejor que otras cuencas que se están viendo más afectadas por la disminución de las lluvias".
La cuenca del Segura sigue en situación de prealerta por sequía y no se esperan cambios, al menos durante el presente año hidrológico que finaliza el 30 de septiembre. Eso sí, si no se registran lluvias en los próximos dos meses, la cuenca entraría en situación de alerta por sequía y se aplicarían restricciones de un 25% al regadío.
¿Estamos preparados para una DANA? Urrea explica que la cuenca está preparada para crecidas ordinarias e incluso superiores pero no podrían evitarse situaciones como las de 2019 si se produjeran lluvias similares, una situación que califica de "poco probable". A pesar de ello, explica que desde 2020 se han invertido 5 millones de euros en la mejora de las infraestructuras hidráulicas y que la cuenca está "en buenas condiciones" para soportar lluvias torrenciales.
En agosto se intensifican los trabajos de limpieza en los cauces donde está presente la caña, una especie invasora que no se puede retirar antes porque vuelve a crecer muy rápido. En este momento esos trabajos de desbroce y limpieza se centran en la vega baja del Segura, en El Reguerón y en Los Alcázares.