Unicaja Málaga compra el billete para la Final Four de la Champions tras doblegar al UCAM Murcia

Murcia

Unicaja Málaga ya es finalista de la Basketball Champions League. Por la vía rápida, tras ganar en el Martín Carpena y hacer lo propio en el Palacio de los Deportes de Murcia en un partido que rompió el equipo andaluz en el inicio del tercer cuarto y que acabó empañado por un rifirrafe innecesario con el choque ya decidido.

El primer cuarto arrancó con predominancia del juego exterior para los universitarios. Jelinek anotó el primer lanzamiento pero dos triples consecutivos fallados calmaron los ánimos. Los de Sito Alonso no modificaron el plan del partido e incluso el debutante Chiozza se estrenó con un tiro de tres que aceleró el tramo final del primer cuarto para el 20-16.

El segundo acto se decantó para los de Ibon Navarro que rápidamente recuperaron la distancia. La insistencia en el tiro exterior se mantuvo en los locales mientras los visitantes se decantaron por el juego por dentro. Pese a eso, la igualdad era máxima, tanto como que Travis Trice con un triple igualó el marcador para el descanso 40-40.

Salió con la quinta puesta el conjunto malagueño tras el descanso y el parcial de 0-7 obligó a Sito Alonso a detener el encuentro tras dos minutos. Intentó reengancharse el conjunto murciano que redujo la ventaja a tres. Pese al cambio de actitud, Unicaja estiró el chicle para alcanzar una ventaja de diez que se quedó en uno menos para el 60-69 al final del tercer acto.

Diez minutos para que Málaga comprase el billete a la Final Four o para que Murcia forzase el tercer encuentro de los cuartos de final de la Basketball Champions League. Y apuntaba a Final Four porque de nuevo rompió el encuentro el equipo visitante con un triple de Barreiro que puso la máxima de 15 arriba.

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Una ventaja que se amplió. El partido estaba decidido, pero Kravish se empeñó en empañar un encuentro limpio con un fea acción sobre Sadiel Rojas, que provocó una tangana en la un enfurecido Manu Marín, preparador físico del UCAM, tuvo que ser frenado por el banquillo porque se lanzó directo a por el jugador de Unicaja.

Se resolvió con tres antideportivas y una técnica, repartidas entre ambos equipos, que modificaron el marcador hasta el 74-96 final que le da el pase a Unicaja Málaga a la Final Four de la Basketball Champions League.