El Real Murcia se enfría ante el Atlético Baleares
El equipo pimentonero recibió una diana tras un error defensivo y fue incapaz de buscar una solución (0-1)
Murcia
El Real Murcia recibió al Atlético Baleares con Serna en portería, Íñigo Piña y Alberto González en el eje de la zaga, Rueda y Solá abiertos, Gracia y Aguza en la medular con Dani Vega como hombre más adelantado, en flancos Pedro León y Loren y arriba Dani Romera. Con este 'once', los granas salieron a morder, controlando la posesión y mimando la pelota. El centro del campo inquietó a los visitantes, que en la primera llegada que tuvieron mataron a los de Mario Simón.
La jugada en cuestión no llevó peligro alguno, balón lateral que llegó fácil a las botas de Solà para el despejo. El lateral del Murcia falló y no conectó con la pelota, que se quedó manso en las botas de Narro para el 1-0. Este jarro de agua fría fue un contratiempo para el equipo, que no dudó en contestar con fútbol y con la fórmula de la paciencia. Por su parte, el Baleares volvió a cederle la bola a su rival.
No dejó de intentarlo el Real Murcia, con Vega muy activo y buscando las cosquillas a balón parado, un signo de identidad esta campaña en el cuadro grana. El equipo de las islas no fue capaz de acercarse en más ocasiones con excesivo peligro, por lo que hizo valer su superioridad en el marcador para aguantar con firmeza hasta el descanso. Las numerosas interrupciones también jugaron un papel importante y el árbitro, sorpresivamente, solo añadió tres minutos extra.
En el inicio de la segunda mitad, con toda la paciencia del mundo, el equipo visitante fue añadiendo intermitencias de peligro. De una ocasión del Baleares, otra del Murcia para enseñar los dientes. La fortuna quiso que Serna estuviera acertado para impedir el segundo en contra. Llegó ahí una jugada de Loren magistral por banda para asistir a Vega, que remató de cabeza y donde el cuero se fue ligeramente desviado.
Con esta crecida pimentonera, intentando de todos los colores llegar a puerta, empezó a moverse el banquillo. Ganet entró por Gracia, además de Arnau Ortiz y Alfon por Vega y Loren. Con esas, Mario Simón siguió sin encontrar solución a un partido que ya se estaba poniendo cuesta arriba.
Con más cambios de cromos, el técnico del Real Murcia continuó recomponiendo el equipo con las entradas de Carrasco y Toril por Aguza y Solá. La idea estaba más clara que nunca, toda la pólvora que se pudo meter estaba dentro del césped y el Murcia tenía que ir a por todo porque quedaban 10 minutos para el pitido final.
Sin tiempo para mucho más, con alguna llegada de libre indirecto y poco más que ofrecer, el Murcia no sumó en su jornada. La tuvo Alfon en la última jugada con un disparo que se marchó alto por encima del larguero y el árbitro decretó el final (0-1).
Rubén González
Redactor de Radio Murcia Cadena SER con gran pasión por el deporte de la Región de Murcia.