El micromentario de Pepe Belmonte: "Feijóo no se ha dado cuenta de que España no es Galicia"

Murcia

Se anima la futura campaña política de esas elecciones que ya están a la vuelta de la esquina, con el debate en el Senado entre el presidente Sánchez y el aspirante Feijoo.

Ni la prensa más conservadora habló de manera entusiasta de la canija e insustancial intervención del secretario general del Partido Popular.

Sánchez, que no es precisamente ni un Demóstenes ni un Castelar, que ha ido aprendiendo a fuerza de reveses, no tuvo enfrente a un adversario de su medida ni de su peso, cuyos asesores, que los tendrá a decenas, deberían haber dimitido de inmediato.

Para empezar, resulta patético y desconsolador que, para reivindicarse y mostrar músculo en un lugar como el Senado, Feijoo tuviera que echar mano a sus cuatro mayorías absolutas en Galicia. Volvía así a las viejas y estúpidas costumbres del pasado, cuando para zanjar una cuestión uno de los contendientes decía aquello de “usted no sabe con quién está hablando”.

Feijóo aún no se ha dado cuenta de que España no es Galicia, aunque Galicia sí forme parte de España. Sigue con sus viejas costumbres de hombre campechano, seguro de sí mismo, que improvisa a cada instante, que llega a las citas sin los deberes hechos, sin la solidez de un discurso que le conceda un mínimo de credibilidad. De ahí que en varias ocasiones sus palabras indujeran a la risa.

Y para mayor abundancia, el presidente Sánchez le ataca, una y otra vez, justo por donde más le duele, recordando la fea costumbre de Feijoo de ir por Europa hablando mal de España, por lo que ya se ha convertido, a ojos de las comisiones y de los diputados europeos, en una especie de pelele que busca, desesperadamente, cómplices para acabar con un gobierno progresista, cueste lo que cueste.

Feijoo está haciendo bueno a su antecesor en el cargo, Pablo Casado, y está convencido de que la técnica empleada en su día por Aznar contra Felipe González le puede dar buenos réditos. Si Aznar, el presidente de la guerra de Irak y el de los pies sobre la mesa hablando en mejicano, logró triunfar con su conocida fórmula “Váyaseseñorgonzález”, Feijoo está seguro de que su eslogan “Voy a derogar el sanchismo” es suficiente argumento para persuadir a los españoles.

Decía Camilo José Cela, que también era gallego, pero mucho más sabio, que “lo malo de los que se creen en posesión de la verdad es que cuando tienen que demostrarlo no aciertan ni una”.