Repsol da por concluida su parada de mantenimiento de 44 días en la que ha invertido 56 millones de euros
En los trabajos han participado 300 empleados de Repsol y una media de 1.200 personas de empresas auxiliares
Cartagena
El complejo industrial de Repsol en Cartagena ha finalizado la parada programada de mantenimiento en el área de Hydrocracker. Durante un total de 44 días ha tenido trabajando en ella 300 empleados propios de Repsol y una media de 1.200 diarios en empresas auxiliares., llegando en punta a alcanzarse las 1.800 personas. De las 40 empresas contratistas que han participado, el 57% son locales.
Las unidades que componen el área de Hydrocracker se dedican, fundamentalmente, a la producción de diésel para vehículos y queroseno, el combustible de los aviones. Desde que se puso en marcha en 2011, tras el proyecto de ampliación del complejo industrial, es la segunda parada de mantenimiento a la que se han sometido estas unidades.
La parada ha contado con un presupuesto de 56 millones de euros y ha permitido realizar trabajos de mantenimiento, preparando las unidades para un nuevo ciclo de vida. Asimismo, parte de estas inversiones se han destinado para mejorar la eficiencia energética en el proceso de fabricación de los combustibles, avanzando así hacia el objetivo de Repsol de ser una compañía cero emisiones netas en 2050.
Entre las acciones más relevantes destaca la incorporación de una nueva caldera para la recuperación de calor en la unidad de azufre para lo cual ha sido necesario el desmontaje del equipo existente en cinco partes y dos grúas. También han sido relevantes los trabajos en una de las dos plantas de hidrógeno con las que cuenta el complejo industrial, y que es la más grande de Europa. En este caso, se ha aplicado un nuevo recubrimiento en su horno para disminuir el consumo de gas natural. Estos nuevos equipos, sumados a otros que se han incorporado, permiten la optimización del consumo de recursos por parte del complejo industrial, y se evita la emisión de 12.500 toneladas anuales de CO2, el equivalente al que absorberían 625.000 árboles.
Para el director del complejo industrial, Antonio Mestre, este tipo de paradas, además de ser generadoras de empleo, permiten “dinamizar otros sectores económicos, más allá del industrial”. Se estima que durante el mes y medio que ha durado la parada, ha sido necesario el alojamiento de unas 1.000 personas en establecimientos hoteleros del entorno, con la consecuente derivada del consumo en otras empresas de servicios de la zona. Según Mestre, “la inversión que hemos realizado en esta parada, junto a los proyectos de transformación industrial en los que estamos inmersos, como la primera planta de biocombustibles avanzados de España, o la nueva planta de hidrógeno renovable"