La CHS no aplicará aún restricciones al regadío tras el rechazo de los regantes y los gobiernos de la Región de Murcia, Valencia y Andalucía

Murcia

No habrá restricciones al regadío en la cuenca del Segura, después de que los gobiernos de la Región Murcia, Andalucía y Valencia, junto con los regantes hayan tumbado las medidas propuestas por la Confederación Hidrográfica para recortar el suministro entre un 10 y un 15%. Con 17 votos en contra, 13 a favor y dos abstenciones, la Junta de Gobierno de la CHS ha rechazado acordar restricciones y pospone las mismas a un seguimiento de la evolución hidrológica que se irá haciendo con carácter quincenal. Será ya en noviembre, cuando se vuelva a reunir este órgano de gobierno, cuando se estudien nuevas restricciones en el marco del Plan Especial de Sequía.

La propuesta con la que llegaba hoy la CHS pasaba por restringir un 10% el agua al regadío tradicional y el 15% al regadío no tradicional. La Confederación Hidrográfica del Segura dice que son restricciones "moderadas" que pretendían que se aplicaran tras dos meses con los indicadores de la cuenca en nivel de escasez.

"Es el segundo escalón de todas las que se contemplan en el Plan Hidrológico y esperamos que el otoño lluvioso que vienen anunciando los responsables de la AEMET nos ayude, en el peor de los casos, a que podamos mantener este nivel", según Urrea. Será ya en el mes de noviembre cuando se vuelva a reunir la Junta de Gobierno para analizar la situación y revisar las medidas que se tengan que aplicar contempladas en el Plan Especial de Sequía (PES).

Por ahora, el organismo no se plantea otras medidas de emergencia, como la apertura de los pozos de sequía. Sí que ha dicho su presidente que se ha trabajado para equiparlos y tener toda la maquinaria que necesitan lista en caso de que se tuviera que proceder a su uso si la situación se agrava.

Sobre el proyecto para la ampliación de plantas desaladoras y de instalación de placas fotovoltaicas para abaratar su coste, recuerda que depende Acuamed. En lo que se refiere a los proyectos impulsados por la Confederación, las de Alicante y Torrevieja, sostiene que están a la espera de los informes ambientales de la Generalitat, un trámite que se ha retrasado por el cambio de gobierno en el ejecutivo valenciano.