El Real Murcia desaparece en la segunda parte
Los errores de marca y la falta de concentración penalizan a un equipo que recibió tres goles del Málaga tras vestuarios (1-4)
Murcia
Partido de fútbol profesional camuflado entre el Real Murcia y el Málaga. No solo por las entidades, sino por las gradas pobladas de murcianistas y un buen desplazamiento de aficionados blanquiazules al Enrique Roca. También se reflejó en el terreno de juego, al menos en la primera parte, donde ambos equipos dieron espectáculo.
El Murcia jugó con Manu en potería, pareja de centrales para Mauro y Alberto García, lateral izquierdo con Andrés López y Santos en la derecha. En la medular formaron Molina, Imanol e Isi Gómez con Vega posicionado en banda izquierda. Arriba Guarrotxena como segundo punta y Carrillo como referencia.
Comenzó el encuentro con una marcha más el Real Murcia y eso se notó justo en el inicio. Mano de Nelson en el área, penalti para el equipo pimentonero y Guarrotxena como ejecutor de la pena máxima. Fueron minutos estelares de los locales, con una intensidad pocas veces vista esta campaña. Esto sucedió en el minuto dos, pero la alegría duró unos cinco minutos.
El jarro de agua fría fue a balón parado, un saque de esquina que Genaro empaló con un obús derecho a la meta de Manu. Ahí los malaguistas crecieron, teniendo más colmillo y siendo incisivos arriba. Fruto de este cambio de papeles, el Murcia empezó a sufrir pero supo manejar la situación.
De lo más peleón de los granas fue Vega, también el propio Guarrotxena manejando el tempo en ataque e Isi Gómez contextualizando el centro del campo con criterio. Aquí sí hubo más conexión entre la medular y la retaguardia, donde el sentido del juego fue teledirigido en todas las fases del césped.
Alfaro, además, probó hacia el ecuador con tres centrales incomodando la banda izquierda malaguista e, incluso, le dio un cambio de aires a la banda de Vega para incidir más en estas labores de ataque. Ahí, cuando mejor recuperó el pulso el Real Murcia, una lesión dejó helada a la grada local. Isi Gómez cayó con su mano izquierda abierta sobre el césped y el codo le hizo un gesto que no fue natural. Tuvo que ser retirado en camilla y en su lugar entró Pina.
Tras ello, la jugada más incómoda del Real Murcia hasta el final de la primera mitad fue la que dibujó Guarrotxena, asociándose con Molina y recibiendo una asistencia de Santos. El testarazo del ariete pimentonero se fue fuera.
Ya en la segunda parte se cambiaron los papeles. Esta vez el gol tempranero fue del Málaga. Y, de nuevo, a balón parado. El saque de esquina llegó como un misil a la cabeza de Murillo, que no vaciló en meter el cuero en la red de los pupilos de Alfaro. Con los minutos pasando y el Murcia sin reaccionar, era momento de agitar el banquillo cerca del 60. Pedro León comandó como extremo derecho el ataque del Real Murcia, en detrimento de Molina, y Rodri Ríos entró por Vega. El equipo ganó intensidad arriba en la presión cuando el Málaga quería salir con el balón jugado.
A partir de ahí llegó el desastre para los locales. Primero con gol malaguista. Jugada de Medina en línea de fondo, quebrando a Santos, que asistió a Dani Lorenzo para que rematara a placer. El error en la marca fue de Andrés López, que pecó de falta de contundencia en la acción. Segundo, con otro gol y más grave si cabe. Desastre en la concentración de Alberto González que no atinó a despejar un balón fácil y que Roberto aprovechó para meter en la portería de Manu García.
Entre los noqueos, Zalaya entró al terreno de juego por Sergio Santos para refrescar las piernas. La sensación de impotencia era real. El equipo grana no estaba haciendo mal encuentro, pero las desconexiones puntuales hicieron un daño terrible en los granas.
No hubo nada más destacable sobre el terreno de juego para los de Alfaro, que anduvieron poco finos arriba y en la creación ordenada de juego. Derrota con un sabor más amargo de lo habitual, sobre todo por la segunda parte tirada a la basura de los locales. También por la entrada absurda y sin sentido de Carrillo en el descuento que le costó la roja.
Rubén González
Redactor de Radio Murcia Cadena SER con gran pasión por el deporte de la Región de Murcia.