El FC Cartagena vuelve a creer ante el Sporting

Cartagena

Terminó la travesía por el desierto. El FC Cartagena vuelve a ganar, vuelve a sumar de tres, y lo hace ante uno de los rivales más complicados de la categoría, el Sporting de Gijón. Los de Calero fueron superiores a los asturianos en términos globales, especialmente en el segundo tiempo pero no fue hasta el minuto 79 cuando Juan Carlos Real, en una contra, adelantaba a los cartageneros en un tanto que fue anulado en primera instancia. Vuelve la ilusión a un Cartagonova que volvía a ver ganar a su equipo 224 días después.

Apostó Calero por un 4-3-3, manteniendo el mismo once que en el Heliodoro salvo por la baja obligada de Alarcón por sanción, cuyo lugar lo ocupaba Damián Musto. Además, Ortuño no volvió a la titularidad tras cumplir ciclo de amarillas. Funcionó sobre el verde la apuesta de Calero, con un Efesé bien plantado y que concedió muy poco al Sporting. Eso sí, le costaba generar en área contraria.

Sin demasiadas ocasiones en el primer tiempo, las dos más claras estuvieron en las botas de Juan Carlos Real, aprovechando la conexión con Hector Hevel que sería protagonista más tarde en el gol. Dos pases filtrados por el neerlandés muy peligrosos: en el primero no llegaba Real a enganchar el disparo, en el segundo, lo estrellaría en el guardameta. Marc también hizo una intervención de mucho mérito sacando una buena mano a un disparo de Gaspar.

En el segundo tiempo el Efesé fue ya claramente superior y generó bastante más peligro en la meta asturiana. Una triple ocasión de Musto Luis Muñoz y Alcalá fue bien salvada por Yáñez, que también detendría posteriormente un disparo de Jansson y se erigió en héroe con una muy buena manopla a un chut raso ajustado de Narváez.

Cote dio el susto con un disparo demasiado cruzado y minutos después llegaría el único gol del partido. En una buena contra que partía de Luis Muñoz, Hector Hevel encontraba desde la izquierda la carrera de Juan Carlos Real, solo en el área, y que batía a Yáñez. El gol no subía al marcador en primera instancia por fuera de juego pero la revisión del VAR acababa validando una posición muy ajustada.

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Se desataba la locura en el Cartagonova y el Efesé tenía varias ocasiones para sentenciar el encuentro, la más clara, una vaselina de Umaro que desviaba ligeramente Yáñez para que el balón se estrellara en el palo. Tras un sufrido córner en contra en el 97, llegaba el pitido final para acabar con una de las rachas más negativas del fútbol cartagenero. La afición, muy metida, vuelve a creer.