Tomás Ros Olivares: "El cadáver no engaña nunca, siempre colabora con los forenses "
Tras cuarenta años como médico forense, el jefe del servicio de Patología del Instituto de Medicinal Legal y Ciencias Forenses de Murcia acaba de jubilarse
El médico forense Tomás Ros visita Hoy por hoy Murcia tras su jubilación
15:06
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1707764785482/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Murcia
Tomás Ros Olivares ha sido jefe del servicio de Patología del Instituto de Medicinal Legal y Ciencias Forenses de Murcia hasta hace unos días. El pasado 1 de febrero y tras cuarenta años de profesión llegó el momento de jubilarse.
Estos días ha recibido el cariño y respeto de sus compañeros, que no han querido dejar pasar este importante cambio en la vida del médico forense para dedicarle la despedida que merecía. Un día después de este homenaje, Ros Olivares pasó por el programa Hoy por hoy Murcia como invitado del espacio de los viernes de Joaquín Ángel de Domingo, magistrado de la Sala de lo Civil y Penal del TSJ Murcia.
Tomás Ros Olivares, a la derecha de la imagen, con Joaquín Ángel de Domingo, magistrado del TSJ Murcia, tras su participación en Hoy por hoy.
Ros Olivares inició su trayectoria profesional como pediatra y médico militar, donde llegó a ser teniente médico de la Armada en el Hospital Naval del Mediterráneo (Cartagena). Pero Tomás siempre había sentido un gran interés por las ciencias forenses, por lo que tras compatibilizar ambas funciones durante un tiempo, finalmente su vida profesional se decantó por la medicina forense "donde he sido inmensamente feliz", ha reconocido en el programa Hoy por hoy Murcia.
Tomás Ros asegura que el cadáver no engaña nunca y que siempre colabora con los forenses. "Las personas muertas no hablan evidentemente, pero sus cuerpos nos cuentan muchas cosas, si estaban solos o acompañados o incluso si eran felices". Durante su intervención en el programa Ros Olivares ha reconocido que quedarse solo en la sala de autopsias ante un cadáver siempre impone, "un cadáver no pierde nunca su dignidad y la muerte siempre impone".
A lo largo de sus cuarenta años de profesión han sido muchos los casos en los que ha intervenido, aunque tener que enfrentarse al cadáver de un menor o a un cuerpo que ha sufrido una violencia desmedida se encuentran entre los momentos más delicados de su carrera. "Aquí en Murcia hemos tenido casos de muertes por violencia de género muy graves donde el asesino se ha ensañado con la víctima", recuerda Ros en Hoy por hoy Murcia.
"Las personas muertas no hablan evidentemente, pero sus cuerpos nos cuentan muchas cosas, si estaban solos o acompañados o incluso si eran felices", ha dicho Tomás Ros en el programa Hoy por hoy Murcia. / Team Static
En este sentido, el ya exjefe del servicio de Patología del Instituto de Medicinal Legal y Ciencias Forense de Murcia participó el pasado mes de octubre en la autopsias de las 13 víctimas del incendio de Atalayas y nos cuenta que "el único consuelo que les puede quedar a los familiares, y así se lo hicimos saber, es que sus allegados no sufrieron, el monóxido de carbono les hizo perder el conocimiento antes de que llegaran las llamas". Otro caso reciente tiene que ver con un atropello mientras la víctima se disponía a cruzar la calle abstraída mirando el teléfono móvil. "Ni se enteró del golpe que le produjo la muerte", recuerda. Por último, Tomás Ros nos ha hablado también del caso de Isabel, una vecina de La Unión que sufría el síndrome de Munchausen y que acabó con la vida de su marido y de dos de sus hijos.
Pese a la parte más 'desagradable' de su profesión, Ros Olivares se siente encantado con el trabajo que ha desempeñado en las últimas cuatro décadas, "el trabajo con los muertos ha sido el 40% de mi profesión, el resto lo he dedicado los vivos y ha sido apasionante", concluye.
