El UCAM Murcia CB hace los deberes contra el AEK

Murcia

El UCAM Murcia, líder del Grupo L de la BCL, recibió a un AEK de Atenas colista y que no conoce la victoria en la ronda de 16 con cuatro encuentros y cuatro derrotas. Los griegos, sin nada en juego ya en la competición europea, empezaron activos en ataque solo en los primeros segundos. También los locales estuvieron eléctricos, tanto con Ennis como con Rodions para sumar los primeros puntos. Caupain falló su primer intento desde el perímetro, pero a la segunda le entró. Ahí estuvo la crecida murciana para que el técnico visitante parara el encuentro con 16-4.

No pudo levantar el encuentro el conjunto griego. Con un AEK sufriendo bajo el aro, Sleva sacó sus mejores minutos en defensa, pero también en ataque. Eso, sumado a la pólvora de Radebaugh, hizo que el entrenador ateniense pidiera otro tiempo muerto. Nada podía parar a los de Murcia, que no bajaron revoluciones ni un segundo y mantuvieron una intensidad que ahogó al rival (35-15).

En el 2Q hubo reacción inmediata de los visitantes, que recuperaron terreno y respiraron. En los primeros dos minutos y medio el UCAM se atascó y solo fue capaz de anotar dos puntos para la incredulidad de Sito Alonso. Ahí tuvo que meter a Sleva otra vez para recuperar sensaciones. Radebaugh fue el elegido para empujar en esa labor con una bandeja de pillería en una penetración prodigiosa.

A pesar de todo, el AEK se sacudió los nervios y dio la sensación de que podía hacer daño al UCAM en un giro inesperado de guion que nada tenía que ver con el 1Q. Los de Murcia anduvieron más torpes de cara al aro y tuvieron intermitencias en una defensa que perdió su sello de identidad en ráfagas antes de la bocina del descanso (55-44).

En el tercer cuarto todo anduvo más equilibrado, con los de Sito Alonso siendo capaces de anotar solo dos puntos llegado al ecuador del periodo, pero manteniendo la defensa. El parcial hasta ese momento era 2-6, solo capaz de romperse por Sleva, que se repuso de un par de acciones donde no logró anotar. En ese momento de zozobra, donde el UCAM intentaba reencontrarse con su mejor versión, Radebaugh y Sant-Roos se pusieron los galones para acabar el 3Q con solvencia (79-63).

En el último cuarto, todo lo que hizo bien el AEK en el inicio del segundo y tercero, se esfumó. El UCAM Murcia CB regresó con pico y pala tras las instrucciones de Sito Alonso y no hubo medias tintas ante los griegos, que no pudieron hacer más que esperar al final del encuentro. Por más que los de Zouros anotaban, el ritmo al aro de los locales incrementó en un duelo constante de canastas repartidas que acabó con victoria universitaria (100-89).