Nuevo episodio racista en el fútbol español, en este caso en el Águilas-Cartagena B. La víctima en este caso fue el jugador del filial del Cartagena, Cassio Júnior. Corria el minuto 90, con 1-1 en el marcador, cuando es expulsado por doble amarilla. Según recoge el colegiado balear Pujol Salar en el acta, entonces el brasileño, cabreado por la expulsión, pega «un pelotazo que impacta en la pared donde se sitúan aficionados del Águilas» aunque «sin llegar a impactar en ninguno de ellos». A partir de ahí, y según el acta arbitral, desde ese sector del campo «se escuchan insultos racistas, por parte de una sola persona, como negro y puto negro». Es entonces cuando se activa el protocolo antirracismo y se advierte por la megafonía de El Rubial, sin producirse más incidentes de este tipo hasta el final del partido.