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Fallece el cocinero Raimundo González Frutos, el primer murciano en obtener una Estrella Michelin

Puso 'El Rincón de Pepe' en el mapa gastronómico y fue el impulsor de que la cocina murciana fuera conocida más allá de la Región

Raimundo González Frutos / UMU

Murcia

El cocinero murciano Raimundo González Frutos, el primero que obtuvo una Estrella Michelin y fundador de un espacio tan emblemático como 'El Rincón de Pepe', ha fallecido a los 99 años de edad. Aunque ahora la gastronomía murciana goza de gran popularidad y reconocimiento, González Frutos fue el primero que hizo posible que esa cocina que vivía de las preparaciones más tradicionales diera un salto definitivo para ser conocida fuera de la Región.

Nacido en Puente Tocinos, en 1925, a lo largo de su trayectoria, fueron numerosos los reconocimientos que recibió: Medalla de oro al Mérito Turístico, Premio Nacional de Gastronomía, elegido por la Academia Nacional de Gastronomía entre los 10 mejores restauradores de España, Premio al Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Murcia, Hijo predilecto de Murcia, miembro de la Chaine de Rotisseure, cofundador de restaurantes de Buena Mesa…. También fue protagonista de diferentes publicaciones y libros gastronómicos.

Fue 'El Rincón de Pepe' el restaurante que puso a Raimundo González en el mapa gastronómico internacional en los años 70: su tío José González lo abrió en 1925, como bodega de vino, acabó convirtiéndose en un referente de la cocina murciana para propios y visitantes, con platos donde la huerta murciana se empapa del Mediterráneo, pero abriéndose también a la influencia de la nouvelle cuisine francesa, personalizada en otra leyenda con la que mantuvo una gran relación, Paul Bocuse, además de otro importante círculo de cocineros españoles: Arzak, Subijana y Luis Irizar.

Las berenjenas a la crema que volvieron loco a Pepe Carvalho

Pero por ese local, 'El Rincón de Pepe', también pasó un novelista gastrónomo como Manuel Vázquez Montalbán, que llevó a su detective Pepe Carvalho a sentarse a la mesa de ese restaurante en las páginas de 'Los Mares del Sur', donde reconocía su debilidad por una de las recetas más celebradas de Raimundo González, las berenjenas a la crema: "Bebió cuatro jarras del Jumilla de la casa y pidió la receta de las berenjenas para darse una vez más cuenta de que si la guerra de los Treinta Años no hubiera sentenciado la hegemonía de Francia en Europa, la cocina francesa a estas horas padecería la hegemonía de las cocinas de España. Su único patriotismo era gastronómico", escribe Vázquez Montalbán en el libro con el que consiguió el Premio Planeta en 1979.