Migrantes del campamento del Hospital Naval protestan porque quieren salir de estas instalaciones a pisos de acogida

Cartagena

Una semana después del intento de amotinamiento denunciado por el Ayuntamiento de Cartagena en el campamento del antiguo Hospital Naval, y que negó la Delegación del Gobierno, los ánimos vuelven a caldearse esta noche en una nueva protesta de los migrantes que se encuentran concentrados en estas antiguas instalaciones militares.

Los migrantes, que esta tarde estaban celebrando la Fiesta del Cordero de la religión musulmana, han conocido que estaban visitando las instalaciones la secretaria de Estado de Migraciones, Pilar Cancela, y la Delegada del Gobierno, Mariola Guevara, con las que han pedido reunirse, sin que haya tenido éxito esa petición.

Los migrantes querían trasladar a las autoridades que han visitado las instalaciones más celeridad en la resolución de sus expedientes migratorios, pidiendo salir de estas instalaciones para poder vivir en otro régimen de alojamiento, a través de pisos de acogida.

De hecho, la protesta se ha iniciado cuando varios autobuses volvían de excursión con un buen número de migrantes, que al conocer de la presencia de autoridades estatales han querido alzar la voz para que conocieran sus protestas.

Este incidente ha sido gestionado por los educadores sociales de la ONG ACCEM, que han requerido la presencia policial, eso sí, fuera de las instalaciones. Hasta nueve patrullas, tres de ellas de la Policía Local de Cartagena y el resto de la Guardia Civil, se han dirigido a estas instalaciones.

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Los vecinos de urbanizaciones anexas al Hospital Naval, preocupados por el ruido que estaban generando las protestas de los inmigrantes, se han acercado hasta la puerta de las instalaciones para conocer qué estaba pasando, aunque la Policía les ha impedido el paso y les han pedido que retrocedieran.

Según testigos del incidente, los ánimos de los migrantes estaban muy caldeados. Los vecinos han hecho pública su preocupación porque esta concentración de personas dé lugar a incidentes de este tipo, cada vez de forma más recurrente.

Desde la Delegación niegan que haya sido ningún motín, sino una mera protesta de los migrantes por su régimen interno de convivencia, en el que piden más celeridad a la hora de tramitar los expedientes de su situación humanitaria. Delegación del Gobierno acaba de confirmar a la SER que la protesta ya ha finalizado y que los migrantes ya están de vuelta a sus habitaciones. También inciden en que no ha sido necesaria la presencia policial dentro del recinto.

Cabe recordar que esta misma tarde, la alcaldesa de Cartagena se ha reunido con la secretaria de Estado de Migraciones del Ministerio, que ha asegurado "que Cartagena no tendrá CETI y que este campamento de migrantes tiene un carácter temporal", algo que ha pedido por escrito la regidora cartagenera al Ministerio.

Cancela también se ha comprometido a iniciar la derivación de los migrantes procedentes de Canarias a los nuevos CETI que se están construyendo por España en cuanto estén habilitados para su uso y a intensificar con el Ayuntamiento los cauces de colaboración en materia de atención social.