El micromentario de Pepe Belmonte: 'Un país diverso'
Columna de opinión del catedrático de Literatura de la UMU para el programa Hoy por hoy Murcia
El micromentario de Pepe Belmonte: 'Un país diverso'
Murcia
Durante estos días, cuando todos estamos atentos a la pantalla del televisor y a las ondas de la radio para seguir al instante las incidencias de la Copa de Europa de Naciones, donde España está realizando un brillante papel, no he oído ni una sola palabra, ni una sola manifestación en voz alta, de esos "Machomán" con pelo en pecho, de la extrema derecha española, amigos de la España casposa y cañí, defensores del rosario y de no dar palo al agua…
Nada he escuchado, decía, sobre ese par de muchachos que están asombrando al mundo con su juego en la cancha, con su desparpajo a la hora de enfrentarse a los defensas, por su nobleza, sabiendo encajar las patadas y los empujones que reciben.
El uno se llama Iñaki Williams y sus progenitores son de origen ghanés. Tiene veinte años y juega en el Athletic Club de Bilbao. Sus padres iban camino de Inglaterra, huyendo de la miseria de su país, pero un alma caritativa les aconsejó venir a España en donde se podía vivir por menos dinero y podían obtener el respeto de la mayoría de los ciudadanos, como así ha sido.
El otro, Lamine Yamal, jugador del Fútbol Club Barcelona, cumplirá diecisiete años el próximo jueves y sus padres también son migrantes, el uno, de Marruecos, la madre, de Guinea Ecuatorial, donde también pasó tantas penurias que decidió echarse el petate al hombro y correr la aventura de salir de país y buscar una vida más tranquila.
Iñaki Williams y Lamine Yamal, con su juego tan vistoso y alegre ayudan a hacer más felices a los españoles durante estos días, y hasta parecen mitigar los calores estivales, a los que apenas prestamos atención centrados en el juego tan vistoso y alegre de la selección española. Ellos, frente a los malos agoreros, sí que representan el auténtico futuro de España.
Así pues, suceda lo que suceda mañana contra Francia, España ha demostrado al mundo que es, como siempre lo ha sido, un país diverso y acogedor, en donde nadie se ha sentido nunca extraño, para lección de quienes predican, con grandilocuencia extrema, la desaparición de los valores patrios.
A todos -incluidos los ‘salvapatrias’ de turno-, feliz verano, cuídense y nos vemos a la vuelta.
Pepe Belmonte
Profesor de Literatura Española de la UMU. Crítico...