Morán asegura que no puede ir en contra de las sentencias de la Justicia y Jiménez dice que "son churras" las sentencias del Supremo sobre caudales ecológicos y "merinas" las políticas del Miteco
Nuevo encontronazo entre el Miteco y el Scrats a cuenta de la reducción de las aportaciones del trasvase al Segura
Murcia
El secretario de Estado de Medio Ambiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), Hugo Morán, ha asegurado que el Gobierno de España no puede ir contra las sentencias del Tribunal Supremo que piden la fijación de unos caudales ecológicos para el río Tajo, lo que supondrá una reducción de las aportaciones del trasvase del Segura.
De este modo, Morán ha afirmado que el ministerio no prevé cambiar la nueva propuesta de reglas del trasvase Tajo-Segura que llevará al Consejo Nacional del Agua en las próximas semanas, tal y como han pedido recientemente las comunidades de Andalucía, Madrid, Valencia y Murcia.
A preguntas de los periodistas durante una visita a las obras que la Confederación Hidrográfica del Guadiana ejecuta en la presa del Gasset, en la provincia de Ciudad Real, Morán ha salido así al paso de las peticiones de estas comunidades autónomas que reclaman al Gobierno central que recapacite su decisión de "aniquilar" el trasvase Tajo-Segura.
Morán ha afirmado que la postura del ministerio es la de "respetar las sentencias que desde los tribunales de Justicia se emiten en un determinado momento".
Y ha recordado que se han producido cinco sentencias en los tribunales que anularon, en una parte importante, el plan hidrológico del Tajo del 2015, precisamente por no incorporar un régimen de caudales ecológicos en la demarcación.
"La administración, el conjunto de las administraciones, estamos obligadas en primer término al cumplimiento de estas sentencias y en el estricto cumplimiento de esas sentencias se ha elaborado el plan de la cuenca y se ha incorporado el régimen de caudal ecológico" para el río Tajo, ha explicado Morán.
Así, ha insistido en que estas sentencias "obligan a tener un régimen de gestión adecuado a la nueva dimensión, que se establece en la planificación hidrológica".
Para el secretario de Estado de Medio Ambiente, lo que sorprende "es que haya quien solicite a la Administración General del Estado que vaya en contra de las sentencias de los tribunales de Justicia", que, ha dicho, "es en último término lo que parece que algunos están pidiendo".
Las comunidades de Andalucía, Madrid, Valencia y Murcia han opinado que el incremento del caudal ecológico del Tajo hasta alcanzar los 8,65 metros cúbicos por segundo, supondrá la reducción de en torno a 100 hectómetros cúbicos al año que se dejarán de enviar desde el acueducto Tajo-Segura a partir de 2027.
Por su parte, el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), Lucas Jiménez, ha respondido diciendo que "son churras" las sentencias del Supremo sobre caudales ecológicos y "merinas" las políticas del Miteco.
"El Tribunal supremo dictó, con arreglo a las sentencias tan traídas y llevadas desde 2019 por el Miteco, que se impusieran caudales ecológicos en los tramos del Alto Tajo donde no se establecieron en su momento y correcto, nadie objeta nada; esto son churras", ha aseverado.
Y añade que el ministerio y la ministra Teresa Ribera, "al albur de la sentencia, vio los cielos abiertos para pegarle soberano tajo al Trasvase Tajo-Segura". Planificaron, elevando innecesariamente los caudales a su paso por Aranjuez, Talavera y Toledo, atendiendo a las necesidades electorales de la política, de su política anti infraestructuras, y anti agricultura, y esto son merinas", afirma.
A su juicio, "por mucho que la Dirección del Ministerio se empeñe en mezclar uno y otro rebaño con artificios siempre quedarán voces, como la del Sindicato que presido, que le recordará tamaña mentira". "El término medio eran 6 metros cúbicos en Aranjuez, el río Tajo estaba sano allá arriba", remarca. "Y el Levante contaba con aguas que pagaban a un precio elevado, generando dividendos -unos 9.000.000 de euros anuales- que repercuten en Castilla La Mancha, Madrid y Extremadura", recuerda.
"Rompieron la baraja en pos de una ideología y no del bienestar del Tajo. Había que decirlo también en agosto y se ha dicho", ha concluido.