Los productores frutos secos de la Región de Murcia aseguran estar viviendo “en una situación agónica”: "Si se abandona el almendro, avanzará el desierto"
La ausencia de lluvias y de soluciones ante la sequía está provocando que las producciones de almendro se encuentren en "una situación límite" ante las "gravísimas pérdidas de cosecha" que se esperan esta campaña junto al incremento de costes productivos, según FECOAM
Entrevista Pedro Guerrero, responsable del sector frutos secos en FECOAM
21:03
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Murcia
Esta siendo un año más cálido de lo normal en la Región de Murcia que ha hecho madurar antes la almendra y los productores ya están están haciendo cálculos. Aunque de buena calidad, la ausencia de lluvias ha provocado que los frutos sean más pequeños y se prevé una reducción de la cosecha en toneladas del 21%.
La previsión de cosecha regional de almendra de este año se cifraba en junio en 4.200 toneladas de pepita, casi un 21% menos que la campaña 2023-24 que ya fue catastrófica, ya que las altas temperaturas y la alta demanda evaporativa en un suelo seco causó un estrés hídrico que redujo el tamaño de la almendra.
La bajada de los rendimientos en campo afecta especialmente a las plantaciones de almendra de secano, que representan en nuestra región más del 91% de la superficie total. Así es, que la rentabilidad de las cooperativas se está viendo amenazada, siendo en muchos casos el tercer año que se mantiene esta coyuntura de forma consecutiva, según ha explicado en 'Hoy por hoy Región de Murcia' Pedro Guerrero, responsable del sector de Frutos Secos en la Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia
A los agricultores les ha costado producir cada kilo unos cinco euros que el precio de mercado no les cubre. Por eso, piden ya la intervención del observatorio de precios que garantice la aplicación de la Ley de Cadena Alimentaria. También demandan a las administraciones estatal y regional una línea de ayudas que permita la supervivencia de los cultivos de secano.
"La pérdida de renta es peligrosa, pero a los que respondemos y somos responsables del sector lo peor es la pérdida del cultivo, que la gentes se aburra y deje de cultivar. Porque esa parcela de esos leñosos, se secan y se van a convertir en un reservorio de plagas que van a contaminar parcelas colindantes", ha añadido Guerrero.
"El no cultivar ese terreno va a romper la biodiversidad medioambiental por la que tanto se intenta luchar. Y la pérdida, el abandono y la retirada del medio rural se convierte en una realidad porque donde se cultiva el almendro no cabe otro tipo de cultivo: ni lechuga, ni brócoli, ni fruta de hueso. Avanzará el desierto", ha concluido
Maica Sánchez
Me escuchas cada día en La Ventana Región de Murcia.
