El micromentario de Pepe Belmonte: 'El verano de los huevos fritos'

Murcia

Está más claro que agua –“clarete”, que decía un amigo mío con no poca gracia- que el PP murciano no puede vivir sin Vox, como si fueran dos hermanos que por el día se tiran pedradas y por la noche cenan juntos en amor y compaña.

Son, dicho de otro modo, como esos novios que rompen sus relaciones, pero que siguen viéndose furtivamente, a escondidas.

Me viene a la memoria aquella frase de Julio Cortázar, extraída de su conocida novela Rayuela, en la que el argentino escribe: “Andábamos sin buscarnos, pero sabiendo que andábamos para encontrarnos”.

Esa evidente y más que conocida incoherencia de criterio por parte del Partido Popular aquí en la Región de Murcia -y no digamos en el conjunto de la nación- ha llegado a hacerse patente durante estos días con el inmediato nombramiento de la abogada Natalia Sánchez, de Vox, como nueva comisionada de Transparencia.

A este propósito, las palabras difundidas en Redes Sociales por el director del diario La Verdad, Alberto Aguirre, eran concluyentes: “Que el PP no haya presentado su propio nombre para el comisionado de transparencia es sintomático de la irrelevancia que da a este asunto y a este órgano, que, a la postre, será moneda de cambio”. Mejor, y más claro, imposible.

En su balance de lo que ha sido el verano en la Región de Murcia, aseguraba el presidente López Miras que ya se había conseguido eliminar a las molestas medusas del Mar Menor, que echan para atrás a gran número de turistas.

Deberá haber sido en la zona en la que él se bañaba, porque en Lo Pagán, en las playas de La Puntica y Villananitos, durante julio y agosto, tocábamos a unas tres o cuatro docenas de medusas por barba.

Había bañistas que, en plan jocoso, con una sonrisa irónica dibujada en su cara, decían que, con tanta medusa tipo “huevo frito”, sólo le faltaban las patatas y una buena cerveza, bien fresca, para no salir en todo el día del agua.

Por cierto, muchas gracias a todos ustedes, por estar ahí en esta nueva temporada. Y gracias, cómo no, a Radio Murcia por su confianza. Así da gusto trabajar.