La Guardia Civil intercepta dos toneladas de boquerones inmaduros en la lonja de San Pedro del Pinatar
El patrón de la embarcación se enfrenta a multas de hasta 60.000 euros
Cartagena
La Benemérita ha interceptado casi dos toneladas de boquerón inmaduro en la lonja de San Pedro del Pinatar, y ha denunciado al patrón de la embarcación que presuntamente lo ha comercializado por vulnerar la normativa de sostenibilidad de especies marinas.
La investigación comenzó hace varios meses, cuando el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil tuvo conocimiento de que una embarcación pesquera realizaba ventas de pescado de talla inferior a la reglamentaria, por lo que estableció un seguimiento minucioso del barco. El pasado martes, una patrulla del Seprona de Monóvar (Alicante) recibió un aviso sobre una posible descarga de pescado inmaduro en la lonja de Torrevieja, pero a su llegada, el barco investigado ya había abandonado el puerto tras la negativa de la lonja a aceptar la mercancía por no cumplir con la normativa de comercialización.
Según pudieron averiguar los agentes, desde Torrevieja, el patrón de la embarcación se dirigió hacia la lonja de San Pedro del Pinatar, donde atracó. Al sospechar que la descarga ilegal se había realizado en este puerto, los agentes inspeccionaron la lonja a las 15:30 horas, en colaboración con el inspector del Servicio de Pesca y Acuicultura de la Región de Murcia. Durante la inspección, se encontró una cámara de almacenamiento cerrada que contenía siete cubetas de boquerón sin documentación y que, según un trabajador de la lonja, pertenecía a la embarcación investigada y que, al no cumplir con la talla mínima, estaba destinado a la producción de harina de pescado, de lo cual ya se había informado al responsable de la lonja.
Un muestreo de las cubetas mostró que el promedio era de 146,7 ejemplares por kilogramo, superando el límite permitido de 125 ejemplares por kilogramo. En total, se incautaron 1.901 kilogramos de boquerón inmaduro. Además, se comprobó que el patrón de la embarcación había reportado a la Delegación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en Murcia solo movimientos básicos entre puertos, omitiendo la presencia de tallas ilegales en su carga. Esta falta de transparencia apuntaba a que podría haber sido vendido fuera del mercado legal.
Como resultado, las capturas fueron inmovilizadas y depositadas para su destrucción, debido a su alta perecibilidad. Además, por estos hechos, el patrón de la embarcación se puede enfrentar a sanciones de hasta 60.000 euros