El SCRATS teme que para 2027 se reduzcan sus recursos hídricos un 35% por el cierre de las aguas subterráneas y los recortes al trasvase Tajo Segura
Sobre el acuerdo UE-Mercosur, Lucas Jiménez, ha indicado que a los que se benefician de él se les debe exigir lo mismo que a los agricultores españoles
Puebla y Lucas Jiménez durante la presentación del calendario del SCRATS para 2025 / Cadena SER
Murcia
El presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS), Lucas Jiménez, ha dicho este lunes en rueda de prensa que debería exigirse lo mismo a aquellos que se beneficiarán del acuerdo UE-Mercosur que lo que se exige a los agricultores españoles, en igualdad de condiciones.
Jiménez, que ha hecho estas declaraciones tras la tradicional presentación del calendario de SCRATS dibujado por Puebla, reconoció que en su sector no se pueden negar a la globalización que supone este acuerdo comercial de puertas abiertas al exterior, si bien recalcó que debe ser así "siempre y cuando" esas empresas extranjeras cumplan la normativa comunitaria.
Por otra parte, el presidente del SCRATS ha dicho que en el año hidrológico 2023.-24 el sistema de trasvase se ha se ha comportado bien, lo que significa que "ha tenido aportes importantes y que hemos gozado de cierta tranquilidad", pero auguró que 2025 será un año complicado, ya que no son optimistas con los recursos que han presentado a decisiones en la planificación del Tajo "teledirigidas políticamente".
Indicó que probablemente saldrán en 2025 unas nuevas reglas de explotación del trasvase, para lo que el sindicato de regantes está en contacto con las fuerzas políticas para una posible reacción.
Lo que realmente más temen actualmente los regantes es lo que ocurrirá en 2027 y es el cierre de gran parte de los recursos de las aguas subterráneas, en torno a los 213 hectómetros cúbicos de agua, es decir, el 35 por ciento del recurso hídrico con el que cuenta la cuenca del Segura y sin el que en época de sequía ocurrirá una situación desesperada para el campo murciano.
Por ello, pedirán una prórroga a tal decisión de recorte de recursos en un escenario en el que además desaparecerán 105 hectómetros cúbicos del trasvase del Tajo. En ese panorama lo único que se ha puesto sobre la mesa son 28 hectómetros cúbicos de agua desalada de ampliaciones de plantas desaladoras del Levante.
A su juicio, no hay una transición ecológica justa en este territorio y se está jugando con el futuro de miles de familias que dependen de la agricultura en un sector que ha ido creciendo desde 1933 en que se proyectó la planificación del trasvase, pasando por las promesas del plan Borrell de interconectar las cuencas hasta el trasvase del Ebro que nunca llegó, explicó.
"Pero los agricultores siguieron invirtiendo, siguieron creciendo y después llegó el 'Plan Agua' que iba a dotar de agua desalada suficiente a un precio maravilloso a todos los agricultores de la Cuenca del Segura, pero ese plan no se produjo", comentó. "Lo que sí están llegando son los recortes y esas amenazas para 2027", añadió.
"Tenemos que hablar de marcha atrás en esa planificación maquillada del Tajo y desde luego tendremos que hablar de amnistía, parón, de prórroga, o como queramos llamarlo, en el tema del recorte de aguas subterráneas", agregó.
Por último, Jiménez va a revalidar su cargo en el sindicato, en un proceso en el que no se ha presentado por el momento ninguna candidatura alternativa y será el próximo viernes que en la Asamblea de este sindicato se apruebe el asunto.
Respecto al calendario de 2025 que ha editado el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, un total de 12 viñetas dibujadas por Puebla lo ilustran. Son unas viñetas en las que este humorista gráfico refleja los principales problemas o preocupaciones del sector primario en la Región de Murcia, todo ello visto desde su punto de vista.
Puebla ha reconocido que para hacer unas buenas ilustraciones tiene la obligación de estar completamente al día, al corriente, de la actualidad de los regantes del Levante.
En sus viñetas no podría faltar el tomo reivindicativo a las principales demandas del sector, como la aplicación de la Ley de la Cadena Alimentaria, para unos precios justos en origen; el incremento de precios que sufrirá el consumidor debido a una menor producción agrícola y ganadera; o la competencia desleal de terceros países.
