Para la familia de Sara Gómez sentar a los ocho médicos del Santa Lucía y al cirujano y anestesista en el mismo banquillo de los acusados "es un insulto"
Sienten que el auto de la magistrada del juzgado número 5 de Cartagena diluye la responsabilidad de los que la familia considera auténticos culpables

Familiares de Sara Gómez protestan ante las puertas del Juzgado de Instrucción Nº3 de Cartagena. / Cadena ser

Cartagena
La jueza del juzgado número 3 de Cartagena ha procesado a diez médicos por homicidio imprudente que acabó con el fallecimiento de Sara Gómez tras ser sometida a una liposucció. Sin embargo, la reacción de la familia tras el auto es de "tristeza y decepción". Rubén Gómez, hermano de Sara, no se explica cómo el anestesista continúa ejerciendo "pese a las tres denuncias que le hemos puesto. Sigue operando en el Centro Médico Virgen de la Caridad a pesar de no tener la compatibilidad. Y parece que tiene el respaldo que no sabemos a qué obedece de los organismo sanitarios de la Región y, a pesar de tener una sanción de nueve meses y un expediente disciplinario por lo mismo. Sin embargo, nadie ha hecho nada".
El auto sienta en el mismo banquillo a ese anestesista y al cirujano junto con "los ochos médicos del Santa Lucía que se dejaron la vida por salvar a Sara de la barbarie que supuestamente realizaron estas dos personas. Ponerlos todos juntos es un insulto a mi hermana y a la familia. Es algo que no merecemos", añade Rubén.
Para Rubén esto es consecuencia "del corporativismo que tuvieron en su momento. Ellos se negaron a denunciar de oficio. Nosotros se lo dijimos. No lo hicieron. Luego fueron como testigos y declararon de forma muy ambigua, quizá tratando de salvar a colegas de profesión. Ahora se han visto en una situación que ellos no sospecharos y se han envenenado con ese corporativismo médico".
Echan en falta que al cirujano también se le impute por delito formal de falsedad y estafa, porque según el hermano de Sara, "engañó a mi hermana en el consentimiento informado al darle a entender que tenía experiencia y esto fue por lo que Sara decidió ponerse en sus manos".
Rubén Gómez asegura que no se van a dar por vencidos después de cuatro años y que seguirán luchando por la Ley Sara.




