Murcia se refresca con cultura: éxito del Glaciar Río, el folklore y el cine de verano

Murcia

El Museo de la Ciencia y el Agua de Murcia se ha transformado estos días en un auténtico glaciar ártico gracias a la instalación Glaciar Río, una experiencia sensorial que incluye más de 300 kilos de hielo real, efectos sonoros envolventes y proyecciones audiovisuales. La propuesta, dirigida especialmente al público infantil y familiar, busca concienciar sobre el papel vital de los glaciares en el equilibrio climático del planeta.

"Queremos que los más pequeños toquen, jueguen y aprendan. Es una experiencia inmersiva, educativa y refrescante", ha dicho Diego Avilés en Hoy por hoy Región de Murcia. La instalación estará disponible durante esta semana y volverá a abrirse al público a partir del 29 de julio.

El concejal ha adelantado que, si la experiencia sigue funcionando como hasta ahora, se repetirá en otras fechas del año. "Es una propuesta atrevida, pero muy bien acogida. Ríos de niños están pasando cada día por el museo", ha resaltado.

Folclore en el Mediterráneo: tradición, intercambio y nuevas generaciones

El Festival de Folclore en el Mediterráneo celebra su 57ª edición con una programación que combina tradición y renovación. Este año, además de las actuaciones nocturnas en la Plaza de la Catedral, se han incluido conferencias académicas y una sesión especial de música folk con DJ para atraer al público joven.

"Queremos que el folclore no solo se baile y se escuche, sino que también se estudie y se entienda”, ha señalado Avilés. Grupos de Senegal, Bulgaria, Zaragoza, Lugo y distintas pedanías de Murcia participan en esta edición, que se presenta como un espacio de convivencia, paz y tolerancia.

Las actuaciones principales se celebran a las 22:00 horas, aprovechando las temperaturas más suaves de la noche. "Es un plan divertido, cultural y muy necesario en estos tiempos", subraya el concejal.

Cine de verano: éxito rotundo y aforo ampliado

El cine de verano en el Auditorio del Parque de Fofó ha superado todas las expectativas. Lo que comenzó con 200 butacas ha tenido que ampliarse a 450 debido a la gran afluencia de público. "No queremos que nadie se quede fuera ni incómodo. La respuesta ha sido increíble", ha afirmado Avilés.

El ciclo, organizado junto a la Filmoteca Regional, ofrece cine familiar y clásicos de los años 80 y 90 en un entorno al aire libre, cómodo y céntrico. Las proyecciones se celebran los miércoles, jueves y viernes de julio y agosto.

"Es una experiencia que nos conecta con los veranos de nuestra infancia, con bocadillo, charla y cine bajo las estrellas”, concluyó el concejal, satisfecho con la acogida de estas propuestas culturales que están llenando de vida la ciudad durante el verano.