"Un desierto": la directora del Camping Villas Caravaning pide un gesto para volver a abrir

Cartagena

El Camping Villas Caravaning, ubicado en el inicio de La Manga, permanece prácticamente cerrado desde que el Ayuntamiento de Cartagena ordenó el precinto de sus instalaciones el pasado 26 de mayo. La medida se adoptó tras una inspección técnica que detectó graves deficiencias en seguridad, como el uso de materiales altamente combustibles, problemas en la red eléctrica general e individual, y la ausencia de un sistema de prevención y protección contra incendios conforme al Código Técnico de la Edificación.

La actividad del camping está suspendida desde 2022, y aunque la empresa gestora ha iniciado actuaciones para regularizar la situación, el consistorio considera que los problemas persisten. “Tres años después, cuando pensábamos que estaban arreglando las instalaciones, lo que comprobamos es que no era así”, declaró el concejal de Urbanismo, Diego Ortega.

Desde la empresa propietaria, Caravanings Costa Cálida S.L., se ha solicitado una autorización excepcional para reabrir parcialmente el 20 % del complejo, concretamente los sectores I, J, K y L, que según afirman, ya cumplen con todas las condiciones de seguridad exigidas por el Ayuntamiento. La petición formal fue presentada el 19 de junio, pero hasta la fecha no ha recibido respuesta oficial.

La dirección del camping ha elaborado un Plan de Autoprotección conforme a la normativa vigente y ha iniciado la redacción del Plan Especial requerido por Urbanismo, en colaboración con el despacho AAUP y los servicios técnicos municipales. Además, aseguran que varias zonas han sido ya adaptadas a las exigencias eléctricas y que están en disposición de reactivar una actividad económica mínima que permita conservar sus 150 empleos y saldar deudas como una factura de agua superior a los 200.000 euros.

Ana Pérez, directora del complejo, describe la situación como “un desierto”. De los 120 empleados habituales, apenas quedan 15. “Los trabajadores me preguntan cada día cuándo volveremos a abrir, pero no tengo una respuesta”, afirma emocionada. La empresa se encuentra actualmente en un ERTE, a la espera de que el Ayuntamiento autorice la reapertura parcial.

Pérez también denuncia que el cierre ha provocado actos vandálicos en las instalaciones y que incluso en invierno, el camping era una fuente de ingresos gracias a clientes habituales. “No pedimos privilegios, sólo el derecho de nuestros equipos a volver a trabajar”, subraya.

El Ayuntamiento, por su parte, ha reiterado que no puede permitir que se repita una situación como la vivida en los incendios de 2021 y 2022, que afectaron a 25 parcelas y causaron una víctima mortal. El concejal Ortega ha manifestado su compromiso de actuar con celeridad en cuanto la empresa aporte la documentación necesaria para obtener la licencia municipal.