“Tengo principio de Alzheimer, pero aquí me distraigo y me divierto”

Cartagena

Luis y María representan a los más de 55.000 casos de Alzheimer y otras demencias que hay en la Región de Murcia. Cada mañana acuden a AFAL Cartagena, un centro de día donde la estimulación cognitiva y las terapias se convierten en el mejor aliado para ralentizar una enfermedad que, de momento, no tiene cura.

Luis, exmilitar y aficionado a la escritura y la poesía, reconoce abiertamente su diagnóstico: “Como yo tengo la enfermedad del principio, Alzheimer, esto hace muy bien… lo mejor es pasarlo aquí”. Entre talleres manuales, actividades de psicología, terapia y momentos de diversión, mantiene su rutina y creatividad: “Tengo escritos un par de libros… y si el amor fuera a la duración de una rosa, desde cerca contemplar a la tristeza…”, recita uno de sus poemas.

María también disfruta de las tareas creativas y de la compañía: “Paso aquí envolviendo unas hermosas macetitas… solo por la mañana, de 9 a 2, haciendo diferentes actividades… lo mejor es que aquí me divierto, aquí río”. Aunque a veces le cuesta animarse a venir, reconoce que pasar la mañana en el centro es “una terapia, muy bien para mí y para todos mis compañeros”.

Los centros de día como AFAL no solo ayudan a las personas afectadas a mantener sus capacidades y su autonomía, sino que también suponen un respiro fundamental para las familias que conviven con la enfermedad. Como explica Luis: “En casa tengo actividades, pero lo mejor es pasar aquí… me distraigo mucho, me río, bailo, canto”.

Cada sonrisa, cada poema y cada manualidad son una pequeña victoria frente al Alzheimer, y para Luis, María y todos los usuarios de AFAL, “aquí nos tratan muy bien, todas las chicas que trabajan aquí”.