Una murciana cancela 48.630 euros de deuda con Repagalia gracias a la Ley de Segunda Oportunidad

MURCIA

El Juzgado de lo Mercantil de Murcia ha exonerado a E.C.A. de una deuda de 48.630 euros aplicando la Ley de la Segunda Oportunidad, mecanismo legal que permite cancelar las deudas a personas que no pueden afrontarlas y han actuado de buena fe.

Entre los requisitos para acogerse a esta ley, vigente en España desde 2015 y reformada en 2022,además de el de actuar de buena fe, destacan: encontrarse en situación de insolvencia actual o inminente, tener dos o más acreedores, no haber sido condenado por delitos socioeconómicos y no superar los 5 millones de deuda.

En el caso de E.C.A., cumplía todos los requisitos, aunque lo desconocía. Su sobreendeudamiento llegó a consecuencia de una estafa en 2023, en la que perdió todos sus ahorros tras confiar en unos falsos brokers e invertirlos en internet. Para intentar mantenerse a flote, recurrió a préstamos y tarjetas de crédito. Sin embargo, con el tiempo los altos intereses y la acumulación de cuotas impidieron que pudiera continuar pagando. Trató de reestructurar sus deudas y alcanzar acuerdos con los acreedores, pero no pudo.

Desde Repagalia explican que se trata de un caso muy habitual que, tras una situación imprevista, algunas personas terminan atrapadas en un círculo de deudas impagables: “Nos encontramos con personas que han hecho todo lo posible por cumplir, pero las circunstancias les superan. La Ley de Segunda Oportunidad les permite borrar el pasado y empezar de nuevo”.

Cuando E.C.A. supo de la Ley de Segunda Oportunidad por primera vez, creía que no era para ella, “que pondrían condiciones imposibles o que tendría gato encerrado” nos cuenta. Sin embargo, se decidió a llamar a Repagalia y descubrió que podía acogerse al procedimiento y que tenía además muchas posibilidades de que el juez perdonase sus deudas. Y es que según datos del ICAB (Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona), aproximadamente el 95% de los procedimientos se resuelven favorablemente.

Con esta resolución, esta murciana de 43 años puede dejar atrás sus años de angustia y proyectar su futuro libre de deudas: “Todavía estoy asimilando que esta pesadilla ha terminado. He pasado noches sin dormir pensando en cómo pagar, y ahora siento que puedo respirar y empezar de nuevo”, explica emocionada.

Casos como el suyo reflejan la importancia de la Ley de Segunda Oportunidad, que permite rehacer su vida a personas que se equivocaron y que no se endeudaron de forma temeraria.