Cada antibiótico cuenta en la lucha contra la resistencia bacteriana

Murcia

Cada 18 de noviembre se celebra el Día Europeo para el Uso Prudente de los Antibióticos, una iniciativa que el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades impulsa desde 2008. El objetivo es claro: concienciar sobre la amenaza que supone la resistencia a los antimicrobianos y promover un uso adecuado de los antibióticos en salud humana, animal y medioambiental.

La resistencia antimicrobiana se ha convertido en uno de los principales problemas de salud pública a nivel mundial. El uso inadecuado de antibióticos —como la automedicación, la interrupción prematura del tratamiento o la prescripción sin justificación— contribuye a que las bacterias se vuelvan más resistentes, dificultando el tratamiento de infecciones comunes.

De la resistencia a la resiliencia: el papel de la enfermería

En España, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) coordina el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), que insiste en que hacer un uso responsable es tarea de todos. En este contexto, la educación sanitaria es clave.

En el espacio SER Enfermeras hemos hablado con José María Guillén Torres, enfermero del Área II de Cartagena, quien destaca la importancia de implicar tanto a profesionales como a pacientes para garantizar un uso racional de los antibióticos y evitar la propagación de resistencias.

Para contribuir a este objetivo, los expertos recomiendan evitar la automedicación, no guardar antibióticos para futuras ocasiones, seguir siempre la pauta indicada por el profesional sanitario y no presionar para obtener antibióticos si no son necesarios, recordando que no sirven para tratar virus como la gripe o el resfriado.