Noelia Ibáñez: "El Prado es un museo para toda la vida"
La directora de Atención al Visitante del Museo del Prado reivindica la experiencia directa con el arte y desvela la magia de pasear entre Velázquez, Goya y Tiziano
Noelia Ibáñez: "El Prado es un museo para toda la vida"
MURCIA
En el corazón del Museo del Prado, donde cada obra guarda siglos de historia, Noelia Ibáñez lleva 18 años conectando el arte con quienes lo contemplan. “Es mucho mejor vivir entre belleza”, afirma la directora de Atención al Visitante, convencida de que el Prado no se visita una sola vez: “Es un museo para toda la vida”.
Entrevista de La Ventana Noelia Ibañez
Ibáñez defiende la prohibición de las fotos para preservar la experiencia directa: “No queremos convertirnos en un loop de selfies; el contacto con la obra es único”. Con más de 3,4 millones de visitantes al año, el Prado apuesta por la digitalización sin perder su esencia: “Tenemos millones de seguidores en redes, pero nada sustituye la emoción de pasear por la sala de Velázquez”.
¿Qué hace único al Prado frente a otras grandes pinacotecas? “Somos fruto del buen gusto de nuestros monarcas”, explica Ibáñez. “Aquí están los Tiziano que encargó Felipe II, los Velázquez y los Goya que definen nuestra historia”. Para ella, la pintura moderna nace con Tiziano, aunque reconoce la genialidad camaleónica de Goya y la supremacía de Velázquez: “Entrar en la sala de las Meninas es como acceder al Santa Santorum”.
Entre sus favoritos, cita Mercurio y Argos de Velázquez, “por lo que cuenta y por lo que significa en mi vida”, y sueña con tener en el Prado El nacimiento de Venus de Botticelli. Para quienes nunca han ido, su consejo es claro: “Déjate atrapar por la belleza, aunque no sepas nada. Pasea, sorpréndete, incluso piérdete”.
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La directora también reivindica el papel de los museos como refugio: “Son gabinetes de maravillas que reconcilian con la humanidad. Si alguien fue capaz de crear esto, todavía hay esperanza”. Y añade un consejo personal: “Cuando el día se complica, cruzo el pasadizo y me pierdo entre las salas. La belleza te ubica”.
El Prado se prepara para la Navidad con propuestas digitales y mantiene su apuesta por la universalidad: “No todo el mundo puede venir a Madrid, pero tenemos la responsabilidad de llegar a ellos”. Eso sí, insiste: “Nada sustituye la experiencia física. El Prado es un museo para toda la vida”.