Aprender a vivir con la ausencia: resiliencia, memoria y señales en el duelo
El cuarto capítulo del podcast aborda cómo reconstruirse tras la pérdida, el papel de los rituales y cuándo buscar ayuda profesional
Murcia
El pódcast “Aprender a vivir con la ausencia” estrena su cuarto capítulo con una conversación profunda sobre cómo afrontar el duelo y transformar la ausencia en memoria. Conducido por Ruth García y Paco Sánchez, el episodio cuenta con la participación de Mirelle Rosique, enfermera jubilada y experta en cuidados paliativos pediátricos y procesos de pérdida.
Duelo y resiliencia, reconstruirse tras la pérdida Cap. 4
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En esta entrega, Rosique explica el concepto de resiliencia como la capacidad de encontrar sentido en medio del dolor, apoyándose en referentes como Viktor Frankl. “Frente a las dificultades, el ser humano puede mirar hacia lo más sólido dentro de sí y recuperar el sentido de la vida”, señala.
El capítulo también destaca el papel de los rituales —desde el velatorio hasta las pequeñas tradiciones familiares— como herramientas para aceptar la realidad y honrar a la persona fallecida. “Recordar es vincularse con el amor”, afirma Rosique, subrayando la importancia de mantener viva la memoria a través de gestos cotidianos, como preparar una receta heredada o evocar una risa compartida.
Otro punto clave es cómo acompañar a quienes atraviesan un duelo. La experta recomienda presencia física, escucha activa y nombrar al ser querido, evitando el silencio por miedo a causar dolor. “No tenemos poder para provocar dolor, pero sí para acompañar”, insiste.
El episodio aborda también las señales que muchas personas buscan tras la pérdida —un sueño, una coincidencia, incluso la aparición de un pájaro— como parte natural del proceso. Finalmente, se analiza cuándo el duelo se complica y requiere ayuda profesional: cuando la persona queda bloqueada, sin poder retomar su vida, durante meses o incluso años.
Con un tono cercano y reflexivo, este capítulo invita a comprender que el duelo no es olvidar, sino aprender a vivir con la ausencia, construyendo un legado emocional que nos permita seguir adelante.
