Cartagena vibra con Medina Azahara en su despedida de los escenarios de la Región
La banda cordobesa cerró su brillante trayectoria de 46 años con un memorable concierto en el Auditorio El Batel
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Cartagena
Desde que Medina Azahara, la banda formada en Córdoba en 1979, anunciara su despedida de los escenarios, cada una de sus actuaciones se convierte en un acontecimiento para sus miles de seguidores. Su recital en el Palacio de Congresos y Auditorio El Batel, de Cartagena agotó en pocos días, hace ya meses, todo su aforo, ante lo que se prometía como una de las escasas oportunidad que a lo largo de casi medio siglo ha habido para verlos en un recinto así, ya que su fuerte han sido los festivales y las fiestas populares, o salas de mediano aforo donde siempre les acompañó un público fiel que repetía siempre que tenía ocasión.
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
A lo largo de estas décadas ha habido varios cambios de formación, y de la original solo sigue el carismático vocalista Manuel Martínez que continúa en plena forma, como demostró en sus más de dos horas de actuación. El núcleo del grupo está integrado también desde hace varias décadas por el guitarrista Paco Ventura y por el teclista Manuel Ibáñez. Y a ese trío de músicos, de los mejores en su género, se unen el bajista Álvaro Coronado y el baterista Fernando Prats, que mantienen la esencia del característico sonido de la banda, un potente rock duro, con raíz andaluza. Es esta una de sus señas de identidad, ya que Medina Azahara nació en plena eclosión de un género que impulsaron Triana, Alameda, Cai, Guadalquivir y Mezquita, y por supuesto los “Medina”, entre otros, a finales de los años 70.
Arrancó el show, este sábado 13 de diciembre, con los acordes de la guitarra distorsionada de “Paseando por la mezquita”, la primera y eterna canción de la banda cuando se dieron a conocer, y ya el auditorio era un clamor.
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Con un impecable sonido durante todo el show, fueron sucediéndose canciones, todas ineludibles, pero insuficientes para abarcar la grandiosidad de su obra de cinco décadas y 24 álbumes: “Algo nuevo”, “Palabras de libertad”, “El vaivén del aire”, que popularizaron en una colaboración con Antonio Orozco, “Junto a Lucia” y “Solo un camino”.
Y entonces llegó maravillosa “Danza al viento”, con la complicidad de ocho fans que subieron a bailar una voluntariosa danza del vientre que evocó las giras en que la bailaba con gran maestría la encargada del puesto de merchandising de la banda.
El mensaje en contra de las guerras encontró su eco en “El soldado”, que dice: "Recuerdo que cuando niño, nunca quise ser soldado, nunca quise combatir. Sólo me gustó luchar por mi libertad y yo destrozaba las armas que a mis manos llegaban".
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Mencionó después Manuel Martínez la anécdota de los premios de la Música donde estaban nominados en la categoría de rock los más grandes: entre otros, Fito, Dover y Mago de Oz. Y los premios fueron para… Medina Azahara con el álbum “Aixa” y la canción “Córdoba” -que el público cartagenero se desgañitó cantando-, un bellísimo himno a su ciudad de origen.
Acto seguido Manuel abrió sus entrañas para hablar de su hijo, el artista Manuel Ángel Mart, vocalista de la banda “Estirpe” prematuramente fallecido en 2021 a los 44 años de edad, de cáncer. En su homenaje interpretaron, ante un público conmovido, una de sus canciones.
Siguieron “Solo y sin ti”, y las maravillosas “El lago” y “Tu frialdad”, de Triana. En el tramo final del show llegaron “Velocidad”, “Hay un lugar” y “Al padre santo de Roma”, una composición de Paco de Lucia que popularizó Camarón aunque sus primeros intérpretes fueron Flamenco, una banda de rock andaluz, verdadero germen del movimiento, que ya la grabó en 1973.
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Medina Azahara / PABLO SÁNCHEZ DEL VALLE-EL BATEL
Con “Necesito respirar”, uno de sus mayores himnos, se despidieron del público para dar pie a que el auditorio entero coreara, como es preceptivo en todos sus conciertos: “Medina, así no se termina…” y volvieran a salir para regalarnos “A toda esa gente”, con su emblemático estribillo de …”sed felices esta noche y soñad”.
El epílogo fue, como era previsible, “Todo tiene su fin”, la canción que hicieron Los Módulos en 1970, pero que sigue plenamente vigente.
Con el deseo de “que tengáis mucha paz, mucho amor y mucha libertad”, culminó una celebración colectiva memorable, el último concierto de Medina Azahara en la región de Murcia. Durante 2026 aún seguirán girando por España (no hay ninguna fecha más anunciada en nuestra Comunidad) para culminar el 21 de noviembre en la plaza de toros de Vistalegre en Madrid, en lo que se anuncia como Medina Azahara y amigos (lo que hace presagiar sorpresas y colaboraciones) en “El último concierto de nuestras vidas”.




