El Betis frena la ilusión copera del Real Murcia en una noche histórica en el Enrique Roca

Murcia

Murcia se volcó con la Copa en un Enrique Roca que fue una fiesta. El estadio registró una entrada con más de 31 000 personas animando a los granas en su duelo frente al Real Betis. La noche comenzó, además, con gesto simbólico: Carlos Alcaraz, número uno del tenis mundial, realizó el saque de honor.

El Betis encontró premio en una acción puntual. Cuando el partido transitaba por la media hora, una mano dentro del área dio lugar al penalti que Cucho Hernández transformó con precisión para adelantar a los verdiblancos. El equipo visitante manejaba la posesión y generaba peligro, pero el Murcia se sostuvo con dos ocasiones claras antes del descanso.

Tras la reanudación, el guion se mantuvo. El Betis controló el ritmo y buscó espacios ante un Murcia que no renunció a sorprender. Sin embargo, la esperanza local se desvaneció en el minuto 85: Aitor Ruibal lideró un contragolpe, su disparo lo rechazó Piñeiro y, en el intento de despeje, el balón terminó en la red tras un desafortunado toque del propio guardameta.Los últimos compases fueron de orgullo grana.

El público reconoció el esfuerzo de los suyos, que compitieron con carácter ante un rival de Primera. El Betis, por su parte, administró la ventaja y selló su clasificación para los octavos de final, cumpliendo con los pronósticos en una noche que quedará en la memoria pimentonera.