Los Alcázares pone freno a las casas patera con una nueva normativa del padrón

Cartagena

Una norma que se ha aprobado por unanimidad. Se trata de una nueva Ordenanza Municipal Reguladora de la Gestión del Padrón Municipal de Habitantes con el objetivo de reforzar el control sobre los empadronamientos, combatir el fraude y prevenir situaciones de hacinamiento en viviendas del municipio.

El alcalde, Mario Pérez Cervera, explica que la iniciativa surge tras comprobar que este tipo de normativa “está funcionando adecuadamente en otros municipios” y ofrece “muchísimas posibilidades para luchar contra el hacinamiento, las casas patera y el fraude en el padrón”. El objetivo, subraya, es “crear un marco regulador que nos permita trabajar intensamente para que el padrón municipal sea lo más acorde posible a la realidad del municipio”.

Aunque el alcalde reconoce que no se trata de una práctica generalizada, sí se habían detectado algunos casos que evidenciaban la falta de herramientas legales para actuar. “Habíamos detectado situaciones concretas y nos dábamos cuenta de que teníamos muy pocas armas para castigar este tipo de conductas”, señala. Con la nueva ordenanza, aquellas viviendas donde se detecte fraude quedarán señalizadas para que cualquier nuevo empadronamiento sea investigado incluso antes de que se haga efectivo.

La norma permitirá así una actuación proactiva por parte del Ayuntamiento. “Nos permite adelantarnos en la persecución de posibles fraudes y castigar especialmente a quienes defraudan o incluso hacen negocio con el padrón municipal”, afirma Pérez Cervera. En este sentido, recuerda que en diversas ocasiones se han puesto hechos sospechosos en conocimiento de la Policía Nacional y la Guardia Civil, como posibles falsificaciones de firmas.

Uno de los puntos clave de la ordenanza es el límite máximo de personas empadronadas por vivienda, fijado en ocho. Una medida que busca evitar situaciones de hacinamiento. “Queremos luchar contra esas casas patera en las que, desafortunadamente, sabemos que existen situaciones de abuso, donde algunos se aprovechan de la necesidad de las personas para hacer dinero”, recalca el alcalde.

La ordenanza también regula un régimen sancionador que clasifica las infracciones en leves, graves y muy graves, con multas que pueden superar los 3.000 euros. Además de la sanción económica, los hechos podrán ponerse en conocimiento de las autoridades competentes si se detecta algún posible delito penal. “No solo es una cuestión de multar, sino de actuar con firmeza cuando se infringe la ley”, explica.

Respecto a las personas que viven en viviendas hacinadas, el alcalde aclara que la actuación municipal tendrá en cuenta su situación. En primer lugar, los técnicos del Ayuntamiento comprobarán que las viviendas cumplen con los requisitos mínimos de salubridad, seguridad y habitabilidad. “Es fundamental garantizar que quienes residen en una vivienda dispongan de condiciones dignas”, apunta. Al mismo tiempo, se verificará si las personas empadronadas residen realmente en el domicilio o si se está haciendo un uso ilícito del padrón para otros fines.

La Policía Local, los inspectores municipales y el personal del padrón podrán realizar las comprobaciones necesarias para verificar la veracidad de los empadronamientos. En caso de irregularidades, la responsabilidad recaerá sobre el propietario de la vivienda. “Si se intenta engañar al padrón municipal, se sancionará”, advierte el alcalde.

Pérez Cervera recuerda que el municipio ha superado recientemente los 20.000 habitantes empadronados, un crecimiento que hace aún más necesario que los datos reflejen la realidad. “Del padrón dependen subvenciones, servicios, derechos y obligaciones. Si no es fiel a la realidad, las consecuencias pueden ser muy negativas”, señala.

La ordenanza ya ha sido publicada y aprobada por el Pleno y se encuentra en periodo de exposición pública. Si no se presentan alegaciones, entrará en vigor de forma definitiva en las próximas semanas. “Nuestra intención es iniciar de inmediato las acciones necesarias y, sobre todo, adelantarnos a los problemas antes de que sea necesaria la intervención de otras fuerzas”, concluye el alcalde.