Cospedal, a Villarejo: "La libretita [de Bárcenas]... sería mejor poderlo parar"
'El País' desvela las conversaciones del comisario y la entonces secretaria general del PP en los primeros meses de 2013, que destapan los esfuerzos desde Interior para ocultar el escándalo de la caja b que manejó el extesorero
Cospedal a Villarejo: "La libretita [de Bárcenas]... sería mejor poderlo parar"
Madrid
La secretaria general del PP entre 2008 y 2018, María Dolores de Cospedal, se empleó a fondo en el primer semestre de 2013 para evitar el desmoronamiento de su partido y del Gobierno, acorralados ambos por una grave sospecha de corrupción tras la publicación de los papeles de Bárcenas, los documentos que acreditaban la existencia de una caja b en la formación conservadora. Así se revela en los audios publicados este lunes por el diario El País.
Cospedal: "Oye, y la famosa libretita, ¿tú crees que la sacarán?"
Villarejo: "Yo, la libretita… a mí no me ha dicho… he hablado con los dos esto…"
Cospedal: "Es que Inda se lo va contando a quien lo quiere oír".
Villarejo: "Ya, pero a mí la famosa libretita que él dice que tal, él lo que me ha dicho es que tiene fotocopia de algunas hojas que el otro le ha enseñado, que no se las ha llegado a dar, el abogado. O sea, que lo de la libretita no la tiene físicamente, ¿eh? Ni siquiera Inda, creo, por lo que me ha dicho. ¿Que va por ahí contando cosas? Es que es un bocazas."
La libretita es como Cospedal se refirió a los papeles de Bárcenas mientras hablaba por teléfono con el comisario Villarejo. Y hablaba con él para que tapara el escándalo, para intentar obstruir la investigación de la caja b del PP. Esa libretita aparece en la conversación que destapa el diario El País, que inicia así una serie que publicará a lo largo de la semana sobre los audios secretos de la corrupción en España.
Los primeros audios muestran los intentos de la entonces secretaria general del PP para que Villarejo frenase la investigación, para impedir que se publicara. Muestran las presiones a los policías que llevaban el caso para que rebajasen los informes policiales en los que llegaba a hablarse de Mariano Rajoy.
Acudió a Villarejo
Cuando leyó en enero de 2013 que Luis Bárcenas, gerente y tesorero entre 1990 y 2009, pagó sobresueldos en negro durante años a una parte de la cúpula del PP, Cospedal acudió a su principal aliado policial desde 2009, el comisario José Manuel Villarejo, quien le informaba desde entonces de la investigación abierta contra la trama Gürtel, vinculada a su partido.
La secretaria general del PP quería saber si el periódico tenía papeles -"la libretita"- para acreditar quiénes eran los beneficiarios de esos sobresueldos en negro y cuánto dinero se había llevado cada uno. Villarejo grabó entonces a Cospedal, y ese material sonoro, que guardaba en su vivienda, fue requisado por orden judicial dentro de la Operación Tándem, que acabó con la detención del comisario.
Aquella conversación, que ahora desvela El País, refleja la preocupación de la secretaria general del PP ante la posibilidad de que "la libretita de Bárcenas" estuviera en manos de los periodistas.
En enero de 2013 se publicaron los papeles manuscritos donde Bárcenas registró durante casi 20 años (1990-2009) una contabilidad paralela, nunca declarada al Tribunal de Cuentas, con las entradas —casi ocho millones de euros que aportaron numerosos empresarios— y salidas de dinero. Bárcenas registró pagos de sobresueldos a los principales dirigentes del PP, entre los que se encontraba el expresidente Mariano Rajoy y quienes fueron secretarios generales y vicesecretarios generales durante aquel tiempo, como Javier Arenas, Rodrigo Rato, Jaime Mayor Oreja, Ángel Acebes, Francisco Álvarez Cascos y la propia Dolores de Cospedal. También apuntó los ingresos de fondos millonarios a través de donaciones de empresarios que tenían prohibido por ley financiar a los partidos políticos al tratarse de contratistas de la Administración.
Las dos causas abiertas de los papeles de Bárcenas
La Audiencia Nacional abrió en 2013 una pieza separada del caso Gürtel para investigar la contabilidad paralela del PP publicada el 31 de enero de ese año. La instrucción judicial reunió decenas de pruebas de la veracidad de los denominados papeles de Bárcenas, con testimonios de algunos de los que recibieron los fondos opacos y de algunos de quienes los dieron; y con documentación que demostraba algunos gastos hechos con dinero negro (en las obras de reforma de la sede de Génova, 13; en el pago de sobresueldos a varios dirigentes del PP; en la compra de participaciones de Libertad Digital). El juicio en la Audiencia Nacional terminó con la condena al extesorero Luis Bárcenas y al PP como responsable civil subsidiario de lo ocurrido. Ahora la causa sigue abierta, pues el Tribunal Supremo deberá resolver los recursos presentados por las acusaciones populares, por el PP y por los condenados del bufete de arquitectura que hizo las obras en Génova,13.
Durante la investigación judicial del caso, el PP fue expulsado como acusación popular –sus iniciativas iban encaminadas a defender al extesorero en lugar de acusarle– y destruyó los discos duros de dos ordenadores de Bárcenas, por lo que la formación conservadora fue encausada en un juzgado de la Plaza de Castilla, que acabó archivando el caso. A la vez, en el Ministerio del Interior se ejecutó un plan, a espaldas del juez que investigaba el caso, para espiar a la familia de Bárcenas e intentar sustraerle documentación que pudiera incriminar al Gobierno de Mariano Rajoy en la financiación ilegal del partido. Esa causa judicial está abierta, con el exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y el exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, procesados junto a media docena de comisarios que participaron en el operativo, entre ellos, el propio Villarejo.
El País publica este lunes parte de los audios de las conversaciones de Villarejo y Cospedal, pero habrá más ya que esta es la primera de varias entregas.