Cannes 2022 | El sueco Ruben Östlund gana su segunda Palma de Oro con la sátira contra el capitalismo 'Triangle of sadness'
El jurado, que ha abusado de ex aequos, ha entregado un premio especial del 75 aniversario a los Dardenne por 'Tori y Lokita' y ha dejado sin premio a la película favorita de la crítica, 'Pacifiction', de Albert Serra
Cannes
El Festival de Cannes y el cine son una fuerza cultural y política. Lo dijo Virginie Efira, la actriz encargada de presentar la gala y lo corroboró el palmarés de esta edición especial en la que Cannes no solo ha celebrado el 75 aniversario, sino que se ha reivindicado como un poder cultural, industrial y político tras la crisis de las salas y del cine de autor tras la pandemia. La Palma de Oro la ha ganado Triangle of sadneess, una comedia que se ríe del mundo actual, del capitalismo, del lujo, de los ricos y que a ritmo de la internacional hunde un crucero de lujo con algunas de las peores personas del planeta, como vendedores de armas, influencers, oligarcas rusos, vamos solo falta un presidente de un club de fútbol.
El sueco Ruben Ostlund se une a ese selecto club de los directores que ya tienen dos Palmas de Oro, ya que en 2017 ganó ese mismo galardón con The Square. Tenía muchos detractores Ostlund y es que la suya es una película que ha generado intensas discusiones. No es fácil que en el cine de autor haya espacio para la comedia social y con gran presupuesto. Ostlund lleva un tiempo divirtiéndose a costa de lanzar pullas a la sociedad actual, incluso a la élite cultural a la que él pertenece. Por no hablar de la fantasía de que gane una película sobre la banalidad de la belleza, el lujo y la obscenidad de la riqueza en un festival como Cannes, donde las playas son privadas, los yates no dejan ver el fondo del mar y donde las influencer vestidas con marcas de lujo se hacen fotos con cualquier cosa. Triangle of sadness empieza riéndose de la belleza. De ahí su título, que hace referencia al triángulo que se forma en la cara donde empiezan a salir las arrugas y donde suele inyectarse el bótox. Un casting de modelos jóvenes, que podrían salir de una tienda de Abercrombie, sirve de prólogo a una violenta y divertida comedia negra sobre la explotación laboral, la superficialidad del mundo y las clases sociales, que tiene un final a lo Parásitos.
El Gran Premio del Jurado ha tenido un ex aequo, algo a lo que ha recurrido el jurado en dos ocasiones en este palmarés. Lukas Dhont por Close y Claire Denis por Stars at noon. Lukas Dhont, descubrimiento del festival que le otorgó la Cámara de Oro y que pasó por Un certain regard con Girl. En Close ha ido a una historia íntima de su infancia para ahondar en la amistad, en protagonizada por Eden Dambrine, que madura a marchas forzadas ante el suicidio de su mejor amigo. Una representación que rompe los estereotipos de masculinidad y que muestra las dinámicas de la presión social en el mundo de los adolescentes. Una película que conecta con una problemática cada vez más desbordada en las sociedades actuales, como es el suicidio infantil y la homofobia. "La fragilidad puede convertirse en un superpoder", decía Lukas Dhont.
La directora francesa, Claire Denis, que no competía desde 1988 con Chocolat, también apunta a un tema candente, la situación en Nicaragua en Stars at noon. Para ello adapta una novela de Denis Johnson, que leyó hace años y de la que quedó impactada. Un relato que le permite poner en pantalla una de las mejores cosas de su cine, la forma en la que rueda los cuerpos. En este caso, la opresión que siente una periodista, Margaret Qually, con el pasaporte intervenido por el gobierno de Nicaragua, que sobrevive prostituyéndose y que acaba enamorada de un empresario con negocios turbios en plena revuelta sandinista.
El coreano Park Chan Wook, ganador del Gran Premio del jurado con Oldboy, gana ahora con Decision to leave, el premio a la mejor dirección. Un merecidísimo premio por uno de los thriller policiales más originales. El director, embriagado por el Vértigo de Hitchcock cuenta una historia de amor basada en la sospecha, la intriga y la atracción a través de un policía que se enamora de la principal sospechosa de un asesinato. El director sorprende por contar una investigación y una historia de amor con un montaje original, con planos que superponen a los personajes uno encima del otro a pesar de que se encuentran en espacios separados.
Como ocurrió en el 70 aniversario, el certamen cuando cumple años se vuelve más generoso y otorga un premio especial. En aquella ocasión hubo premio para Godard, que además dio un rueda de prensa pro FaceTime, antes incluso de que el Zoom llegara a nuestras vidas. Este año ese premio ha ido para a los hermanos Dardenne por Tori y Lokita. Los cineastas belgas cada vez que vienen a Cannes pillan premio y este año no iba a ser menos. Aquí ganaron la Palma de Oro con Rosetta en 1999, película con la que cambiaron el cine social europeo, y con El niño en 2005. Su cine repite la misma fórmula, pero siempre encuentran la manera de conectar con el momento actual, con los problemas de Europa. En este caso, han conseguido emocionar al retratar el drama de dos jóvenes africanos. Una historia de amistad truncada por la sociedad europea, culpable del maltrato a los migrantes.
El premio del jurado ex aequo para Jerzy Skolimowski por Eo y para Las ocho montañas, de Felix van Groeningen y Charlotte Vandermeersch. Dos películas diferentes, pero que han creado discusión durante el certamen. Las ocho montañas es una correcta mirada a la amistad y a elegir el modo de vida, basada en la poética y exitosa novela de Paolo Cognetti. Felix van Groeningen -director que fue descubierto en Cannes con Alabama Monroe- y Charlotte Vandermeersch adaptan esta historia italiana que nos habla de la montaña, del bosque, la naturaleza, la ciudad y de relaciones de amistad y de paternidad. Por su parte, el veterano director polaco Jerzy Skolimowski, que llevaba años sin dirigir, propone en EO, una fábula sobre la Europa actual en la que vemos el colapso del mundo moderno con los ojos de un burro. Un homenaje al clásico El azar de Baltasar, rodado por Robert Bresson. "Gracias a mis burros", decía el autor de películas como El grito.
El premio a mejor actriz recompensa un trabajo interpretativo soberbio, pero también es un manifiesto político. "El cine siempre está cuando aparece la oscuridad", decía emocionada Zar Amir Ebrahimi, que tuvo que huir de su país después de que un ex suyo filtrara un vídeo sexual suyo. Exiliada en Francia protagoniza la película de otro exiliado, Ali Abbasi. Holy Spider es un thriller policial en el que interpreta a una periodista que desciende a las cloacas de la ciudad iraní de Mashhad para investigar los asesinatos en serie de trabajadoras sexuales por parte del llamado "asesino de arañas", que cree que está limpiando las calles de pecadores. Un personaje que sufre la violencia verbal y el machismo de una sociedad patriarcal como Irán. "Es una película que habla de cómo sufren las mujeres, en Irán pero también en otros países del mundo".
El mejor actor ha sido Song Kang-ho, el coreano al que vimos en Parásitos y que ahora protagoniza Broker, la película de Kore Eda. Un pícaro que se encarga de robar niños abandonados y venderlos a familias. Como todos los personajes del director japonés, el suyo es tierno, complejo, lleno de contradicciones. Un pillo que se redime, al que el actor le da carisma en esta road trip emotiva y tierna.
El premio a mejor guion se lo ha llevado el director egipcio Tarik Saleh (Crimen en El Cairo -con la que ganó premio en Sundance y Seminci, The contractor), que en Boy from heaven cuenta una especie de convención vaticana en una escuela islámica donde ocurre un asesinato. A través de un joven e inocente hijo de un pescador, humilde y temeroso el director compone un thriller político en el que muestra la manipulación de los distintos poderes que manejan Egipto, el religioso, el policial y el político. Una película sutíl e interesante que peca de algo tediosa.
Palmarés del Festival de Cannes 2022
Palma de Oro: Triangle of Sadness, Ruben Ostlund
Gran Premio del Jurado: Close de Lukas Dhont y Stars at noon, de Claire Denis
Premio del Jurado: Eo, de Jerzy Skolimowski y Las ocho montañas, de Felix van Groeningen y Charlotte Vandermeersch
Dirección: Park Chan-Wook por Decision to leave
Guion: Tarik Saleh por Boy from heaven
Mejor actriz: Zar Amir Ebrahimi, por Holy Spider
Mejor actor: Song Kang-ho, Broker
Palma de Oro al mejor cortometraje: The water murmurs de Jianying Chen
Camerera d'Or: War Pony, de Riley Keough y Gina Gammell
Queer Palme: Joyland, Saim Sadiq