Los Veintisiete han logrado un acuerdo parcial para el embargo de petróleo y han desbloqueado el sexto paquete de sanciones cuando se cumplen 100 días de la invasión rusa en Ucrania. El acuerdo ha llegado después casi ocho horas de reunión y tras escuchar vía telemática la intervención del presidente de Ucrania. El objetivo es suspender las compras de petróleo ruso que se transportan por barco hasta la UE manteniendo abierto el oleoducto de suministro a Hungría. Los presidentes han valorado de «histórica» la decisión de reducir a un 10% la dependencia del petróleo ruso. No obstante, Macron ha advertido que «nadie debe subestimar que puedan tomarse decisiones mas drásticas». «No hay que excluir nada, todo depende de la situación sobre el terreno». Asimismo, han insistido en que el gas es «una real amenaza» y han vuelto a exigir a Rusia que se retire del territorio de Ucrania. Los jefes de Estado y de Gobierno han acordado dejar por el momento fuera del embargo al petróleo ruso el oleoducto que abastece a Hungría para desbloquear el sexto paquete de sanciones que permitirá poner fin a las importaciones de este combustible por vía marítima desde Rusia, lo que en la práctica supone vetar al menos dos tercios del total del petróleo que llega a la Unión Europea. El acuerdo apunta un embargo sobre todo el petróleo importado por mar «antes de que acabe el año» y deja para una segunda fase sin calendario preciso el desarrollo del embargo aplicable al ramal sur del oleoducto de Druzhba, que abastece a Hungría, República Checa y Eslovaquia. Los Estados miembros seguirán negociando los próximos días los detalles para materializar el embargo parcial sobre el petróleo que llega por vía marítima con el objetivo de cerrar esa parte del acuerdo esta semana, según fuentes europeas. Sin embargo, la exención se concretará «en cuanto sea posible», sin un plazo cerrado, según recoge el texto de conclusiones de los líderes sobre la fórmula concebida para eximir a Hungría de cumplir el veto a las importaciones, atendiendo a su gran dependencia del petróleo ruso y a las dificultades para encontrar alternativas inmediatas, por no tener salida al mar que facilite el abastecimiento por otros proveedores. “Acuerdo para prohibir la exportación de petróleo ruso a la UE. Esto cubre inmediatamente más de dos tercios de las importaciones de petróleo de Rusia, cortando una enorme fuente de financiación para su maquinaria de guerra”, ha proclamado el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en Twitter. El oleoducto de Druzhba es uno de los más grandes del mundo y abastece a media docena de países de la Unión Europea, si bien la exención se contempla como una medida para salvar el rechazo de Hungría a las sanciones y beneficiará también a Eslovaquia y República Checa. El sexto paquete de sanciones por la invasión de Ucrania incluye otras medidas coercitivas que ampliarán la lista de nombres cuyos activos en la UE serán congelados y tendrán prohibida la entrada a suelo comunitario y desconectarán al principal banco ruso, Sberbank, y otras dos entidades del sistema internacional de comunicación financiera Swift. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha asegurado a última hora de este lunes que agradece el sexto paquete de sanciones de la Unión Europea, pero a su juicio «ha pasado mucho tiempo sin que se hayan reforzado las sanciones europeas». «La pausa para acordar nuevas sanciones en Europa ha sido demasiado larga. El quinto paquete de sanciones se presentó el 8 de abril, por tanto, ha pasado mucho tiempo sin que se hayan reforzado las sanciones europeas contra Rusia», ha recalcado Zelenski en un comunicado de la Presidencia de Ucrania. Así, ha afirmado que agradece que «Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, apoye los intereses de Ucrania, los intereses de toda Europa», sin embargo «Rusia debe sentir un precio mucho más alto por su agresión». Para Zelenski, «cuanto más completo sea el abandono del petróleo ruso, mayor será el beneficio para la propia Europa al final». El precio del barril de petróleo Brent, de referencia para Europa, subía antes de la apertura de los mercados del Viejo Continente hasta los 124,03 dólares, su mayor coste desde principios del pasado mes de marzo, después de que los Veintisiete hayan acordado un embargo al petróleo ruso, aunque por ahora dejará fuera de las sanciones el oleoducto que abastece a Hungría. El precio del barril de crudo Brent se revalorizaba un 3,85% respecto del cierre de ayer, hasta situarse en su mayor nivel desde el pasado 9 de marzo, tras superar el umbral de los 124 dólares por unidad. Asimismo, el precio del barril de petróleo West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, se situaba en 119,42 dólares, frente a los 115,07 dólares del cierre del lunes, también máximos desde el pasado 9 de marzo.