Marion Cotillard: "Todos podemos aprender de Juana de Arco"

A la actriz Marion Cotillard la hemos visto cantar en La vie en rose, la película con la que ganó el Oscar. También en Nine, musical en el que trabajó con Penélope Cruz. Y el año pasado la vimos interpretar a una cantante de ópera en Annette, película de Leos Carax, donde también entonaba algunos acordes. No la habíamos visto, al menos en España, subirse al escenario de un espacio operístico como es el Teatro Real. Lo hará el próximo 7 de junio para representar a Juana de Arco en la hoguera, obra dramática de Arthur Honegger (1892-1955), que ha presentado junto al director de escena, Àlex Ollé, de La Fura dels Baus, y el director musical, Juanjo Mena, y que se representará en ocho funciones hasta el 17 de junio.

La actriz, que interpretó por primera vez este papel en 2005 en Orleans como relevo de su madre, la actriz Niseema Theillaud, recitará un texto acompañada por la orquesta y el coro, que en esta obra tiene un papel fundamental incrementado en esta ocasión, y con una escenografía apocalíptica situada en un futuro atemporal. "Es un personaje inspirador", decía la actriz. "Todos tenemos cosas que aprender de ella, tanto los hombres, como las mujeres", añadía.

"Juana de Arco es alguien que sigue su instinto y eso le llevó a hacer cosas extraordinarias. Tenía una fe más fuerte que las convenciones que ataban a las mujeres. Se quitó las cadenas y salió a hacer lo que quería hacer con una potencia y una fuerza extraordinarias", describía Cotillard a su personaje. La actriz no duda en defender el papel de las mujeres en la sociedad, así como la lucha contra el cambio climático. Son dos de los frentes en los que no duda ni un segundo sobre su posición. "La condenaron a muerte injustamente, no pudieron encontrar ni una prueba de brujería, y la condenaron por vestir de hombre".

Cotillard conocía a Álex Ollé, director de escena, que concibe la producción como una distopía, con un mundo arrasado como lo fue el que vivió Juana de Arco. Ya no es la Guerra de los Cien años, es Siria, Somalia o Ucrania. "No somos capaces de cambiar y evitar repetir y repetir las barbaries, eso cuenta esta ópera", explicaba Ollé en la presentación ante los medios. Influido por La nueva edad media, el libro de Umberto Eco, así ha basado esta puesta en escena en la que Cotillard es el centro. "Es la primera vez que siento al coro tan cerca, que dialogo con él, el coro me toca, les puedo mirar a los ojos", explicaba la actriz sobre las novedades de esta nueva versión.

La lectura de este proceso inquisitorial fue parte de la preparación de Cotillard para el papel, en el que la dificultad de seguir el ritmo de la música de Honegger, de gran colorido y complejidad, le supone "cada vez una nueva aventura" en la que debe adaptarse al director musical, en este caso Juanjo Mena. "Hay que hablar con un ritmo distinto, seguir la música y cada director musical te lleva por un sitio", contaba la actriz que viene justo de presentar en el Festival de Cannes la película Frère et soeur, de Arnaud Desplechain y de presentar su propia productora.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

Cotillard actuará junto al actor Sébastien Dutrieux (Padre Dominique), las sopranos Sylvia Schwartz (la virgen) y Elena Copons (Marguerite), la mezzosoprano Enkelejda Shkoza (Catherine), el tenor Charles Workman (Porcus), el bajo-barítono Torben Jügens (Heraldo), el Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real y los pequeños cantores de la Joven Orquesta de la Comunidad de Madrid (JORCAM).

La obra será precedida por la cantata "La damoiselle élue" ("La doncella bienaventurada"), de Claude Debussy (1862-1918) sobre libreto de Dante Gabriel Rossetti, protagonizada por la soprano Camilla Tilling y la mezzosoprano Enkelejda Shkosa.