El Girona se aferra a la épica y consigue remontarle la eliminatoria al Eibar en Ipurúa

Tuvo dos y marcó dos. El plan de partido no le pudo salir mejor a Míchel y su Girona estará en la final del playoff de ascenso a Primera División tras eliminar al Eibar en campo. En la previa del choque apuntó que su equipo no tenía nada que perder y que esa falta de presión podría traducirse en un mejor juego de sus futbolistas. Dicho y hecho. Girona y Tenerife pugnarán por el último tren con destino LaLiga Santander.

El partido

El primer chispazo del duelo no tardó en llegar, nada de nada. Borja García cazó un balón en la frontal del área, cuando llevábamos apenas 50 segundos del partido de vuelta, y niveló la eliminatoria con un tanto que poco puede envidiarle al trallazo de Aketxe en el partido de ida. Eliminatoria de golazos y todo por decidir, ahora, en 89 minutos o 119.

Podría parecer que, a partir de ese momento, el encuentro iba a tornarse en un intercambio de golpes entre ambos conjuntos. Nada más lejos de la realidad. La primera parte brilló por su intensidad pero también por la falta de claridad en el último tercio de campo. El Eibar no quería desesperarse y el Girona se centró en salvaguardar el tesoro que había conseguido en el primer minuto.

Ampliar

El autor del tanto Borja García tuvo que ser sustituido en el descanso pero no afectó demasiado al estado de su equipo. Los catales salieron, otra vez, muy valientes y a punto estuvieron de darle la vuelta a la eliminatoria. Sin embargo, los armeros crecieron poco a poco en el segundo tiempo y pasito a pasito se fueron acercaron a la puerta defendida por Juan Carlos. El guardameta de Gudalajara se erigió como el auténtico héroe de los de Míchel. Primero, salvando con una mano providencial el remate de Leschuk. Poco después, sacó en la línea el toque de un compañero.

Los locales estaban en sus mejores minutos y Stoichkov estrelló el balón contra el travesaño, con un rebote endiablado que le nególa gloria a los vascos botando en la misma línea. El tiempo reglamentario no fue suficiente y el duelo se marchó a la prórroga.

La prórroga

Mereció más en el último tramo el cuadro de Garitano pero el fútbol no trata de merecerlo sino más bien de hacerlo. Y el que lo hizo fue el Girona. Otra vez, nada más arrancar el 'segundo partido', Stuani cazó un balón dentro del área tras un córner y dobló, no sin el suspense del VAR, la ventaja de su equipo. Ahora sí, el Girona estaba completando la gesta. La grada en Ipurúa estaba helada pese a estar en el mes de junio.

Salió hasta el 'viejo rockero' Fernando Llorente en busca de un tanto que clasificara al Eibar para la 'gran final'. Pero no, no fue suficiente. El conjunto catalán supo defender la ventaja cosechada a lo largo de dos horas de encuentro. Parecía casi imposible después de la temporada de uno y otro y, sobre todo, después del partido de ida. Pero así es el fútbol. Imprevisible.