La intensa ola de calor, que mantiene en alerta a toda España, salvo Asturias y Canarias, no da tregua y seguirá afectando a la mayor parte de la Península y Baleares durante el fin de semana, puesto que la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha extendido la previsión «como mínimo» hasta el sábado, sin descartar que pueda sumar alguna jornada más. Los máximos picos de calor se darán este martes con temperaturas extremas que dispararán los termómetros hasta los 43-44 grados en zonas del valle del Guadalquivir y entre 43-42 grados en el valle del Guadiana. En el resto del país se podrían alcanzar hoy los 40 grados en áreas cercanas a los valles del Tajo y del Ebro, como en Zaragoza, Toledo y Madrid, mientras que se superarán los 36 grados en amplias regiones peninsulares, excepto en las costas del norte peninsular y en puntos del Mediterráneo. Según la AEMET, se trata de la peor ola de calor desde hace 20 años y augura un verano más caluroso de lo normal. Además, las extremas temperaturas ponen en alerta a 11 comunidades: Andalucía, Comunidad de Madrid, Extremadura, Castilla-La Mancha, La Rioja, Comunidad Valenciana, Región de Murcia, Navarra, Cataluña y Castilla y León y Baleares. Así, se mantiene la previsión de que estabilidad generalizada y muy fuerte insolación, lo que junto con la entrada de una masa de aire muy cálida procedente del norte de África, está provocando un importante ascenso de las temperaturas, mínimas y máximas, en buena parte de la Península. «Nos encontramos en un episodio de ola de calor que se mantendrá, al menos, hasta el sábado 18, sin descartar que se prolongue algún día más, especialmente en la mitad oriental peninsular», explica la AEMET en una nota informativa especial con motivo de este episodio. A esta situación se suma que el viento de componente sur está arrastrando polvo en suspensión que puede originar calimas y reducir la visibilidad. Las temperaturas se sitúan este martes en valores superiores a 36ºC en amplias zonas de la meseta norte, alto Ebro, sur de Galicia, interior del Cantábrico oriental y Mallorca, y se podrán alcanzar los 39-40ºC en el valle del Ebro. En el centro y sur peninsulares las temperaturas se mantendrán altas y se alcanzarán o superarán los 40ºC en amplias zonas, sobre todo en los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir, donde se podrán superar los 42ºC. La AEMET señala que entre el miércoles y el viernes aumenta la incertidumbre sobre la evolución de las temperaturas aunque en general no prevé cambios significativos. Si bien, ve probable un ligero descenso en el área cantábrica y en la mitad sur de la Península, mientras que seguirán subiendo en el valle del Ebro. Respecto al jueves, la AEMET espera un probable aumento térmico en el área cantábrica y un ligero descenso en la vertiente atlántica y en otras zonas del interior peninsular. El viernes, aunque con mucha incertidumbre, la mayoría de los escenarios prevén una nueva subida de las temperaturas en la mayor parte de la Península y Baleares. Asimismo, las temperaturas mínimas también serán elevadas y no bajarán de 20 y los 25ºC en amplias zonas del sur y del centro peninsular. Desde el sábado ve posible que las temperaturas desciendan de forma significativa en la mitad oeste peninsular y de manera ligera en la mitad oriental, aunque en todo caso los termómetros seguirán con valores muy elevados. La incertidumbre es elevada porque una DANA se situará cerca de Madeira y no se puede determinar aún con precisión su desplazamiento hacia la Península, aunque la mayor parte de los escenarios esperan que la ola de calor finalice el fin de semana. Según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), los valores diurnos se encuentran entre 7 y 12 grados por encima del promedio normal para esta época del año, es decir, se sitúan entre el 5 por ciento de las temperaturas más altas medidas en estas fechas. Durante este episodio temprano de calor las temperaturas mínimas son también elevadas, con valores entre los 20 y los 25 grados en amplias zonas del sur y zona centro, y según datos de la AEMET, esta madrugada ha sido muy cálida, con valores entre 4 y 13 grados por encima de lo normal en amplias zonas de la península. Desde la Agencia de Meteorología han alertado de la posibilidad de tormentas dispersas en el interior peninsular en todas las provincias de la comunidad de Aragón, en las provincias de Soria y Lleida, y en la Ibérica riojana, sobre todo por las tardes, y que pueden estar acompañadas de granizo y fuertes rachas de viento, aunque no es probable que produzcan lluvias intensas. Asimismo, estas tormentas pueden favorecer un descenso transitorio de temperaturas allí donde se produzcan y que, por tanto, los valores máximos no alcancen registros previstos tan elevados en esas zonas. Ante esta situación de calor, Protección Civil y Emergencias ha alertado también de altas temperaturas y por riesgo extremo de incendios forestales ya que, salvo en puntos de Galicia, de la cornisa cantábrica y del este peninsular, el riesgo de incendio previsto para hoy en la Península y en las Islas Baleares es «extremo». Otro de los factores atribuidos al calor extremo es el índice de radiación ultravioleta, que también se mantiene esta jornada elevado en la mayoría de las capitales españolas, y así, entre este martes y el miércoles registrarán valores máximos, que oscilarán del nueve al once (de una tabla que va del 1 al 11). Estas magnitudes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aconsejan una protección extra, de manera que hay que evitar o limitar las salidas durante las horas centrales del día, utilizar crema solar (mínimo factor 15 y preferiblemente 30), buscar siempre la sombra y usar gafas de sol que protejan contra las radiaciones ultravioleta A y B.