La comedia y la corrupción en el PP
El último sketch lo ha protagonizado Esteban González Pons intentando explicar la presentación ante el Tribunal Supremo de un recurso solicitando la absolución de Luis Bárcenas y la posterior retirada de este una vez que se hizo público
Miguel Sánchez-Romero: 'El PP se empeña en demostrarnos que la corrupción puede ser divertida'
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Madrid
Desde que en 2013 la entonces secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, irrumpiera en el terreno de la comedia con el gag del Finiquito Diferido, el Partido Popular nos regala recurrentemente alguna piececita cómica con Bárcenas como protagonista, posiblemente con la sana intención de demostrarnos que la corrupción puede ser divertida.
Aunque no todas alcanzan el nivel del Finiquito Diferido -una joya del humor, magistralmente interpretada por una graciosísima Cospedal a la que algunos llaman desde entonces la Whoopi Goldberg blanca- se agradece el empeño en hacernos reír un poco.
El último sketch lo ha protagonizado Esteban González Pons intentando explicar la presentación ante el Tribunal Supremo de un recurso solicitando la absolución de Luis Bárcenas y la posterior retirada de este una vez que se hizo público. Pons se apresuró el lunes a responsabilizar de la maniobra jurídica a la anterior cúpula del PP presidida por Pablo Casado, pero las fechas no coincidían. Así que Pons no tuvo empacho en corregirse a sí mismo al día siguiente afirmando: "Yo no diría que lo había hecho Pablo Casado. Si puedo, diría que se presentó en el periodo de interregno, cuando una dirección del PP ya se había ido y otra dirección del PP todavía no había llegado".
"Interregno" es de ese tipo de palabras mágicas del humor cuya mera enunciación ya te predispone a la risa, como Espinete o Paquirrín. Es verdad que tampoco en este caso las fechas del recurso coinciden con las del interregno, pero qué más da. Es posible que entre el cerebro de González Pons y la realidad se haya producido un interregno. Además, por qué exigir a González Pons que nos trate como adultos que saben comprobar fechas en un calendario. No hay que ser tan exigentes con nuestros políticos. Yo ya no lo soy. Después de esta semana, juro entregar mi voto a cualquiera que me prometa noches con temperaturas por debajo de los 20 grados.