Después de Andalucía
Un resultado tan sonoro no se explica solo por decenios de fatiga ante gobiernos repetidos. Ni por las corruptelas o corrupciones de algunos o bastantes de sus dirigentes. Tiene que ver con una desconexión más esencial: la izquierda no hace vibrar a los segmentos más dinámicos de la sociedad
Después de Andalucía
Barcelona
El Partido Popular ganó en buena lid las elecciones en Andalucía. Y ahora es justo que los demás, pasado el susto, y a medias el disgusto, reaccionen también correctamente. Lo más urgente es que analicen por qué han perdido la empatía con las clases medias urbanas ascendentes. Todas y cada una de las veinte mayores ciudades andaluzas han dado la victoria al PP. Un resultado tan sonoro no se explica solo por decenios de fatiga ante gobiernos repetidos. Ni por las corruptelas o corrupciones de algunos o bastantes de sus dirigentes. Tiene que ver con una desconexión más esencial: la izquierda no hace vibrar a los segmentos más dinámicos de la sociedad. Es un drama. Debe averiguar por qué, y cómo remediarlo.
Una parte de la respuesta está en el Gobierno español, al fin y al cabo el más atacado en la campaña, y el que más responsabilidades asume. Parece adecuado que se convoque de urgencia un consejo de ministros para el sábado. Con el propósito de gobernar. De acelerar la actualización de la respuesta española al impacto de la crisis de Ucrania. No es una asignatura fácil.
Tiene que combinar dos principios. Uno, el realismo, que exige explicar y asumir que estamos en guerra (aunque no la queramos) y que somos más pobres y debemos aceptarlo, siempre que lo hagamos todos: o sea, nada de medidas frívolas ni superficiales.
Otro es que hay que seguir prestando más apoyo a los vulnerables, a los débiles, a quienes menos ingresan y más sufren la inflación y otras penurias: porque habíamos quedado en que de esta salíamos todos juntos, y de forma equitativa. Juntar los dos principios en un solo paquete de medidas no es coser y cantar.
Xavier Vidal-Folch
Periodista de 'EL PAÍS' donde firma columnas...