Un juzgado de Pozuelo rechaza de nuevo el recurso de Rubiales para evitar la difusión de sus datos personales
La juez argumenta que las noticias tienen “interés público” y que no hay indicios de que los periodistas robasen la información. La Audiencia Provincial de Madrid tiene la última palabra
Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol / Rodrigo Jiménez (EFE)
Madrid
La titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón, Carolina González, ha rechazado el recurso presentado por el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, contra el digital El Confidencial, en el que solicitaba el secuestro de las nuevas informaciones publicadas, entre ellas supuestos whatsapps remitidos por Rubiales al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el argumento de que habían sido obtenidas de forma ilícita y el carácter privado de la federación, con lo que se discutía que los periodistas estuvieran amparados por el derecho fundamental a la libertad de información.
La juez manifiesta en su auto que estos nuevos artículos “no suponen cambio alguno” frente a la anterior solicitud, también desestimada, para que el diario cesase en sus publicaciones. Argumenta que no hay indicios de que los periodistas obtuvieran la información de forma ilícita y sostiene que las noticias tiene “relevancia informativa” e “interés público”, aunque la RFEF no sea una institución pública.
En este sentido, la juez recalca que la federación de fútbol “es una institución asociativa privada de utilidad pública” y por tanto “está sometida a similares obligaciones que el resto de organismos públicos”, con “privilegios en la obtención de recursos públicos”, debiendo “rendir cuentas anuales y facilitar a las administraciones públicas los informes que les soliciten sobre el cumplimiento de sus fines”.
La titular del juzgado apunta a que los supuestos “cobros de comisiones” o “pagos de viajes de placer con fondos” de la RFEF son hechos de “dudosa legalidad” y censura la “mala fe procesal” de los querellantes porque Rubiales relató ante el juzgado hechos “propios de una película de espionaje” para justificar el robo de datos de su terminal, que iban desde supuestos actos de piratería informática, al robo de ordenadores o hasta la infestación por la aplicación Pegasus, cuando ahora ha denunciado a su tío ante otro juzgado por el posible robo de esos datos.
Aunque la juez ha rechazado el recurso, la Audiencia Provincial de Madrid tiene la última palabra, pues los querellantes han recurrido en apelación ante este órgano jurisdiccional, que aún no se ha pronunciado.
