Los incendios activos siguen arrasando hectáreas en España: el país registra el peor año de la década en superficie quemada con más de 200.000
El fuego en La Vera se ha estabilizado mientras el de Arbo, en Pontevedra, suma ya más de 300 hectáreas quemadas
Madrid
El fuego continúa muy presente en España y la meteorología en los últimos días no ha ayudado en las labores de extinción y control de los varios incendios que siguen quemando hectáreas en el país. Concretamente, son más de 200.000 hectáreas, según las estimaciones del Sistema Europeo de Información de Incendios Forestales (EFFIS).
Algunas de las comunidades más afectadas son Galicia, donde agentes ambientales de la Xunta localizaron este sábado una pastilla de encendido, o Castilla y León, que este fin de semana registraba hasta ocho focos activos y una decena controlados.
Controlado el incendio de La Vera, que ha quemado 250 hectáreas
El incendio forestal de Villanueva de la Vera, en la comarca cacereña de La Vera, ha quedado controlado este domingo después de calcinar unas 250 hectáreas y se ha desactivado el nivel 1 de peligrosidad.
En los primeros momentos del incendio, que comenzó el viernes, fue necesario el desalojo preventivo de varias viviendas aisladas cercanas al fuego y de un campamento de verano con un centenar de menores, que fueron trasladados al polideportivo de la localidad. Agentes de la Guardia Civil y voluntarios de Cruz Roja acompañaron el sábado a los responsables del campamento para la recogida de enseres y ropa.
En las labores de extinción trabajan este domingo dos retenes y un camión, además de un técnico del Plan Infoex y un agente del Medio Natural. Y en el que afecta a los términos municipales de Garganta de la Olla y Aldeanueva de la Vera, también en la comarca de La Vera, un retén helitransportado, un helicóptero, un técnico del Plan Infoex y dos agentes del Medio Natural. El segundo fuego se originó ayer por la tarde a consecuencia de una tormenta, en una zona de alta montaña, y fue estabilizado poco antes de la medianoche
El fuego en Arbo (Pontevedra) llega a las 400 hectáreas quemadas
El incendio de Mourentán, en Arbo (Pontevedra), que se encuentra controlado, ha calcinado ya 400 hectáreas, según los datos recabados por la Xunta hasta las ocho de la mañana de este domingo, y allí ha sido decretada la situación dos, una medida preventiva por la proximidad de las llamas al núcleo habitado de As Searas.
En la misma provincia, en A Cañiza, en el lugar de Oroso, comenzó otro fuego, a la una de la madrugada, que afecta a diez hectáreas y ante el cual, por precaución, se decretó también la situación dos, debido a su cercanía al polígono industrial del municipio.
Además, en Padróns, en Ponteareas, hay otro fuego activo, originado a las 23:15 del sábado, que ha acabado con veinte hectáreas. Ya en la provincia de Ourense, según el balance facilitado por el Gobierno gallego a la prensa, está controlado el incendio de Castrelo de Miño, con 200 hectáreas devastadas.
Declarada la situación 2 en un fuego de A Cañiza por su cercanía a un polígono
La Consellería de Medio Rural ha declarado este domingo como medida preventiva la situación dos en un incendio forestal activo en el ayuntamiento pontevedrés de A Cañiza, en la parroquia de Oroso, por su proximidad al polígono industrial del municipio.
El fuego, informa un comunicado, se inició a la una de la madrugada. Hasta el momento se han movilizado para su control un técnico, dos agentes, cuatro brigadas, dos motobombas y otras tantas palas.
Castilla y León: 3 fuegos activos y 16 controlados
La fotografía que deja el parte de incendios de este 31 de julio en Castilla y León es de tres fuegos activos, los tres en Zamora, dos de otros días y uno nuevo en Carbajales de Alba, mientras que han quedado controlados los tres incendios de Burgos, incluido el Quintanilla de Coco, que llevaba una semana activo, y el de Otero de Naraguantes, en León, que se inició el viernes.
Todos los fuegos están en el menor nivel de peligrosidad, el cero, salvo dos de Zamora que están en nivel uno, en una escala ascendente que acaba en el 3, el Losacino, que se produjo el pasado domingo, al parecer intencionado; y el que lleva desde el 17 de julio en Losacio, causado por un rayo, ambos todavía activos.
Han quedado controlados los tres incendios de Burgos, en Orón, término municipal de Miranda de Ebro, que se produjo el viernes, y que ha quemado 28 hectáreas de arbolado y más de cinco de matorral; lo mismo que el de Espinosa del Camino; mientras que el tercero, el Quintanilla del Coco, se originó hace ya una semana.
El otro fuego controlado ha sido el de Otero de Naraguantes, en Fabero, en León, que se inició el viernes, aunque los trabajos realizados durante esta noche permitieron ya esta mañana rebajar al nivel cero su peligrosidad.
De acuerdo al parte de fuegos de las 19:00 horas, están controlados otros 16 incendios, que incluyen los anteriores, y que por provincias son 4 en León, 3 en Ávila, Burgos y Zamora, dos en Salamanca y uno en Valladolid. Y han quedado extinguidos otros cinco, dos en Palencia, y sendos en Burgos, León y Valladolid.
En Galicia, "todo indica" que los incendios de Arbo y A Cañiza fueron "provocados"
Galicia despide julio pendiente de los incendios forestales y de los termómetros. El calor extremo no favorece además la situación de los incendios, que continúan una jornada más afectando a las zonas en alerta naranja, las de las provincias de Pontevedra y Ourense.
El incendio declarado en Mourentán, en Arbo (Pontevedra) continúa activo y ha calcinado ya unas 350 hectáreas, según los datos recabados por la Xunta hasta las 13:30 horas de la tarde de este domingo.
Allí ha sido decretada la situación dos, una medida preventiva por la proximidad de las llamas al núcleo habitado de As Searas. En él trabajan siete técnicos, 16 agentes, 53 brigadas, cinco palas, 33 motobombas, diez aviones, nueve helicópteros y agentes de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
En la misma provincia, en A Cañiza, en el lugar de Oroso, también permanece activo un incendio que afecta a 25 hectáreas y ante el cual, por precaución, se decretó también la situación dos, debido a su cercanía al polígono industrial del municipio.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha señalado que "todo indica" que los incendios de Arbo y A Cañiza fueron "provocados", por lo que avisa que los culpables "van a ser perseguidos y puestos a disposición de la Justicia", puesto que "quemar el monte es un delito" que pone en peligro "la vida de personas" y "los bienes y las casas de mucha gente".