Rodrigo García Barcha: "La vida no imita a nadie. Todo el mundo imita a la vida"
El cineasta colombiano comparte cómo fue el proceso de creación de la serie 'Santa Evita'. Conversa también sobre el oficio de contar historias como uno que no tiene fin, pues todas las personas siempre necesitan nuevos relatos a los que recurrir.
La entrevista | Rodrigo García Barcha: "La vida no imita a nadie. Todo el mundo imita a la vida"
Madrid
Contar historias era lo usual en el entorno donde Rodrigo García Barcha creció. Los amigos de sus padres eran escritores, cineastas y pintores. Si acaso, algún médico, pero todas las personas que llegaban a casa de Gabriel García Márquez y Mercedes Barcha traían consigo algo que contar. Años después de esta crianza, el cineasta codirigió y produjo 'Santa Evita', adaptación de la novela que narra el periplo del cadáver de Eva Duarte de Perón antes de ser sepultada en Argentina.
Una cosa que le dio valor al productor ejecutivo para contar la historia de 'Evita' fue que no estaban haciendo una serie histórica, sino una adaptación de la novela del argentino Tomás Eloy Martínez, donde los lectores consideraban verídico lo que se inventó el autor e irreal lo que realmente sucedió. El buen recibimiento entre el público argentino de la serie, piensa García Barcha, se debe a que "no es una biografía ni una interpretación del peronismo". Siempre le interesó en el libro la relación, dentro de las contradicciones del machismo, que tenían los personajes masculinos con el cuerpo de Eva, al que santificaban y despreciaban por igual.
Durante la preparación de la historia, García Barcha quedó sorprendido en su primer viaje a Argentina, pues sintió que el peronismo seguía vivo, con muchas interpretaciones detrás de sí. Quizás la más simple, aquella de la iconografía de Eva en los murales de Buenos Aires, recordando que siempre estuvo del lado del pueblo. Aunque García Barcha haya trabajado mucho en historias con personajes femeninos no tiene "un discurso sobre la mujer", sino que le interesan las complejas relaciones interpersonales con las que sus personajes conviven. Al preguntarle sobre cómo la historia de Eva Perón es una que incluye la lucha por los derechos de las mujeres en Argentina, resulta inevitable hablar de las diferencias sociales que en la actualidad intentan mermarlos. "Las mujeres con dinero siempre pueden viajar a un lugar si necesitan un aborto y las otras menos. Y las niñas, menos", comentó el director, tomando como ejemplo el derecho a decidir sobre los cuerpos de las mujeres.
"Un don para interpretar ese mundo tan particular"
Uno de los fallos que ve el cineasta en las adaptaciones de los libros de su padre, Gabo, es la excesiva fidelidad a los diálogos en sus libros, pues son inverosímiles y demasiado poéticos para ser dichos por una persona en una situación cotidiana. Para la adaptación de Netflix de 'Cien años de soledad', Rodrigo García Barcha, quien la produce junto con su hermano Gonzalo, sabe separar su labor de la que hizo su padre: "lo ultimo que quieres es que el hijo del autor, que además es cineasta, esté encima jodiendo" durante la escritura del proyecto. Accede a dar su opinión cuando se la han pedido sobre las modificaciones del libro que otorgó en 1982 el Nobel de literatura a García Márquez, pero siente que "el hecho de que yo sea su hijo y sea cineasta no quiere decir que yo tenga un don para interpretar ese mundo tan particular" escrito en uno de los libros más leídos en lengua castellana.
"La vida no imita a nadie. Todo el mundo imita a la vida", dice García Barcha respecto al mundo de la ficción, en el que ha dirigido títulos como 'Cosas que diría con sólo mirarla', 'Albert Nobbs', 'Los Soprano' o 'A dos metros bajo tierra'. No siente que el mundo esté más loco o intolerante que antes, sino que es más bien el exceso de información lo que nos hace percibir eso. "El mundo da vueltas. Uno solo lo sigue".
Fernanda Fernández
Redactora y productora en 'A vivir que son dos...