Ideología del tomate
Ese tomate hace política. Me refiero a la ideología que respalda una decisión particular quizá minúscula, pero que se ensancha cuando se suma a otras decisiones particulares quizá minúsculas
La píldora de Elena Medel | Ideología del tomate
Madrid
Ese tomate hace política. Me refiero a la ideología que respalda una decisión particular quizá minúscula, pero que se ensancha cuando se suma a otras decisiones particulares quizá minúsculas. Me refiero también a ese tomate de la frutería junto a la parada de autobús, no al tomate que corona una pila en el supermercado, idéntico en forma y en tamaño y en fulgor al resto de tomates sobre los que se alza. Existe ya una declaración de intenciones en el sitio que el destino le ha otorgado: la frutería junto a la parada de autobús. Hace política el tomate. En esa frutería se mezclan los cajones de plástico con frutas y verduras, alguna estantería con conservas y legumbres por si así se acercan quienes prefieren las grandes superficies para ahorrar tiempo. Han escrito a mano las ofertas, y las destacan con rotuladores fluorescentes. Aguarda ahí el tomate, que te nutre con vitaminas e ideología y calcio, ahí el tomate esforzándose por no romantizar la situación: qué encanto el del pequeño comercio, qué magia la de llamar por su nombre a quien hoy te cobra el tomate y en noviembre las naranjas, y al mismo tiempo qué putada los horarios que no existen y los festivos que no existen, y los impuestos que sí y las cuotas que también. Pero me refería al tomate, claro: a la voluntad ideológica que defiende ese tomate en un cajón de plástico. Se trata de ese tomate quizá no redondo, quizá no tan rosa o no tan rojo, quizá con un golpe o con la piel rota, cultivado y recogido cuando corresponde, igual no como corresponde. Escoges ese tomate feo, y tu dinero hace política. Puede que tu gesto implique unos céntimos más, o desviarte cuando vuelvas a casa, o sumar otra parada en otra tienda. Compras un tomate. Lo lavas, lo troceas; lo aliñas con sal y con aceite. Ahí tu cena. Masticas y tragas. Te alimentas. Es política. Fin de la metáfora.