La Comisión Europea ha dado carpetazo al MidCat, el gasoducto entre España y Francia, actualmente paralizado y que, según el Gobierno de Pedro Sánchez, podría servir para enviar gas desde España hasta el resto de Europa. En la rueda de prensa de los martes, Tim Mcphie, el portavoz de la Comisión para asuntos energéticos, se ha alineado con el presidente Emmanuel Macron y señala que no es un proyecto prioritario para Bruselas. La Comisión recuerda que es así porque ni España ni Francia quisieron incluirlo en esta lista de infraestructuras energéticas sujetas a financiación europea. «No es un proyecto de interés común y no está en la lista de proyectos sujetos a financiación. Fue candidato, pero finalmente no fue incluido, porque ni Francia ni España pidieron su inclusión y decidieron aparcarlo porque no estaba maduro. Así que no está en la lista», ha declarado el portavoz comunitario. Mcphie dice, además, que el proyecto de gasoducto entre Francia y España no podría ser financiado con dinero europeo porque ahora solo se hace con infraestructuras energéticas que no sean utilizadas para combustibles fósiles. Añade, además, que no está lo suficientemente maduro para poder valorar si podría ser utilizado para enviar hidrógeno verde, como ha defendido el Ejecutivo español. «No estamos en una situación en la que podamos juzgar si se puede utilizar. Eso tiene que ser desarrollado por los estados miembro y por los promotores», ha sentenciado.