Haaland arrasa al Sevilla
El Manchester City golea en el Sánchez Pizjuán con una actuación estelar del noruego (0-4)
Era la crónica de una goleada anunciada. No estaba bien el Sevilla y el Manchester City, por mucho halago que hiciese Guardiola a sus rivales en rueda de prensa, llegaba a presentar su candidatura a favorito. Un doblete de un insaciable Haaland, que ha llegado para romper todas las redes de Europa, otro tanto del talentoso Foden y uno de Ruben Dias sirvieron para que los ingleses se llevasen el partido ante un desdibujado Sevilla.
El Manchester City ganó al Sevilla sin aparente esfuerzo
El ambiente era espectacular, como acostumbra, en el Sánchez Pizjuán. Había que intentar amedrentar a Erling Haaland, por muy difícil que parezca encontrar los sentimientos en lo más parecido a un cyborg que ha pisado un campo de fútbol. La alineación que había elegido Julen Lopetegui era extraña (sin una referencia clara, Isco era lo más parecido a un '9'), pero no podían dejar que esa garra de su público se quedase en la grada. Por desgracia, no se puede ponerle puertas al campo, barreras al mar o límites al delantero noruego del Manchester City. Las buenas intenciones sevillistas estaban ahí, pero una asociación por banda del City dejó a De Bruyne en una posición franca para asistir a un Haaland que, indetectable, abría el marcador.
Veinte minutos había durado la resistencia de los andaluces, dando paso al asedio de los ingleses. No es que el Sevilla hubiese bajado los brazos, pero sí daba la sensación de que los jugadores debían dar todo de sí para poder acercarse a la frontal del área rival. Solamente tuvieron una llegada peligrosa que finalizó el Papu Gómez, enviando el balón demasiado alto. Mientras, el City estaba llegando sin sudar, robando muy fácil el balón y asomándose a las inmediaciones de Bono sin mucha más dificultad. La única buena noticia para los de Nervión erala llegada del descanso sin más goles que lamentar.
No tardó Lopetegui en cambiar el sistema. Joan Jordán y Rafa Mir entraron por Rakitic y Delaney, naturalizando el esquema sevillista. Por desgracia para los del Sánchez Pizjuán, el Manchester City es uno de los grandes favoritos de la Champions League por demostraciones de fuerza como la que estaba aconteciendo en el campo. De Bruyne y Haaland (o viceversa), ya habían protagonizado el único gol del partido, y juntos, pero no revueltos, estaban rompiendo el nuevo planteamiento sevillista. Solo el acierto de Bono mantenía esa distancia mínima e irreal en el electrónico, pero faltaba el tercero en discordia entre el dúo dinámico del City. Phil Foden, tan joven como talentoso, bailó en el área sevillista entre los defensores y batió al meta marroquí con un pase a la red, tan preciso como imparable. Era un 0-2 y el problema no era ese, sino que podían ser muchos más.
La escabechina acababa de empezar. Un fuera de juego de Bernardo Silva provocó que se anulase el tercer tanto, obra de Gundogan, siendo el preludio del que sí subiría al marcador. Otra vez Foden, flotando entre camisetas blancas, buscó anotar su doblete con un remate duro que no pudo atajar Bono. El rechace le cayó a Haaland, siempre bien colocado y con el dedo en el gatillo, metió el tercero de los suyos. Era también la tercera vez que debutaba en Champions con un equipo, y se iba a ir del campo de la misma forma que en las dos anteriores, con su nombre en la hoja de goleadores. Apenas nadie lo había conseguido, solo podía lograrlo él y un par de elegidos más.. Por suerte para el Sevilla, Pep Guardiola decidió sacarle del campo en el minuto 70, evitando así que rompiese cinco récords más en los minutos que quedaban.
El cuarto gol se hizo de rogar, no acabó subiendo al marcador, dando por bueno ese contundente 0-3. La diferencia era palpable, pero podía haber sido mayor. Esa sensación de impotencia e inferioridad no ayuda a un Lopetegui que ya está muy tocado, pero poco se podía hacer cuando un monstruo como Haaland llegaba a verlos. La candidatura del City ya ha llegado a la oficina de la Champions League. La duda es a qué oficina llega la candidatura de un Sevilla que, tras un verano muy difícil, no parece tener una solución en el corto plazo.
Víctor Diéguez
Periodista según la UCM. Pasión por el deporte...